México.- En la mayoría de las personas, un ataque de hipo suele durar solo unos minutos, pero hay extraños casos en los que este puede extenderse por horas y, en situaciones extremas, hasta por semanas si es que está asociado a una enfermedad no diagnosticada. Sin embargo, sentir hipo es una sensación incómoda e insoportable, de la cual las personas buscan deshacerse de manera inmediata, la mayoría de las veces con remedios caseros.
Sin saber muy bien si se trata de un mito o una realidad, las personas recurren a la tradición o a aquellas recomendaciones que encuentran en internet y que, para varios pacientes resultan ser efectivas, algunas de ellas incluyen consumo de agua, dejar de respirar y hasta una probadita de azúcar. ¡Veamos de que se tratan!
1. Tomar agua al revés
Se recomienda tomar un vaso de agua “al revés”, la cual preferiblemente debería estar casi congelada, pues se supone que así el impacto será más fuerte y contrarrestará las contracciones involuntarias del diafragma que produce el hipo. Hay quienes incluso no necesitan consumir el vaso completo, pues con una cucharadita les basta.
2. Aguantar la respiración
Se trata de inhalar profundamente una gran cantidad de aire y retener la respiración. Para que el hipo desaparezca con mayor rapidez lo mejor es taparse la nariz, cerrar la boca y mover el diafragma como si estuvieras inhalando y exhalando aire a mucha velocidad.
3. Recibir un gran ‘susto’
Al parecer lo que se necesita para desaparecer el hipo es generar un impacto muy fuerte en el organismo, por lo que para muchos suele resultar efectivo cuando alguien los asusta. Sobre esta misma creencia se encuentra la de morder una rodaja de limón y chupar su jugo, pues se dice que su sabor tan fuerte provoca en el cuerpo un impacto similar al de sufrir un susto de muerte.
4. Una cucharadita de azúcar
Este es el remedio favorito de los amantes del dulce, pues consiste únicamente en consumir una cucharada de azúcar, aunque, para que el método funcione, es necesario dejar la sustancia en la boca durante varios segundos. En este caso, el azúcar no solo quita el hipo, sino que también aporta una gran cantidad de energía al cuerpo.
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Es difícil determinar si estos métodos obedecen a mitos o realidades, pero lo cierto es que para muchos suele funcionar. Sin embargo, esta información no está científicamente comprobada ni avalada por entidades médicas, por lo que todo aquel que intente uno de estos métodos, suele hacerlo bajo su responsabilidad.
