Mazatlán, Sin.- Un total de 80 personas que no cuentan con documentos para su estancia y libre tránsito por México, y que eran transportadas en dos autobuses hacia la Ciudad de México y otros estados, se dieron a la fuga la mañana de este sábado en la sindicatura de Villa Unión.
Según información de Bomberos Veteranos de la estación Villa Unión, les reportaron dos personas enfermas que viajaban en uno de los autobuses de alquiler que venían a cargo de la Secretaría de Migración.
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Al llegar al lugar, los elementos no pudieron atender a los enfermos porque al parecer los originarios de Senegal les impidieron el acceso a la unidad. También llegaron agentes de la Guardia Nacional para brindar apoyo a los bomberos, pero corrieron con la misma suerte y decidieron retirarse.
Se informó que momentos más tarde el autobús regresó a la estación de bomberos de la sindicatura porque las personas que venían enfermas empeoraron.
De nueva cuenta los elementos de la Guardia Nacional se hicieron presentes en el lugar, y al bajarse los pasajeros del autobús para esperar a que fueran atendidos los enfermos, supuestamente los senegalenses volvieron a ponerse violentos, mientras que otros se hicieron pasar por enfermos tirándose al piso.
En un momento de distracción de los policías federales, todos los migrantes se dieron a la fuga, algunos hacia el puerto de Mazatlán y otros se quedaron en la sindicatura de Villa Unión.
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El conflicto
Según testigos y otros extranjeros que viajaban en el autobús, hubo un conflicto con los mismos migrantes de Senegal, quienes se apoderaron de toda la comida que traían de reserva.
Dijeron que fueron recogidos en Sonoyta y se dirigían a Nayarit, Zacatecas y Ciudad de México, donde Migración tenía pensado dejarlos para que buscaran salir adelante por su cuenta.
Señalaron que algunos se quedarían en Mazatlán buscando suerte y algún trabajo, ya sea vendiendo tacos o donde les pudieran apoyar con empleo.
Las dos personas que se sentían mal eran de Ecuador y presentaban un cuadro de deshidratación por falta de comida, ya que tenían tres días sin comer, porque al parecer no les gustaba la comida mexicana.