Hace unos días hablé en este espacio de como la pandemia renovará a la clase política en Sinaloa, comenté que los adultos mayores que quieran presentarse al proceso electoral tendrían que estar muy bien cuidados por un equipo medico, expliqué que sería un riesgo su participación política como candidatos en el proceso del 2021, tanto por el contagio a electores, como su difícil recuperación si fuese diagnosticados con COVID19.
Lo que callé, mejor dicho, lo que omití es como sería la clase política o como serán los cuadros políticos que deberán estar en la boleta electoral el siguiente proceso electoral en Sinaloa. Lo guardé para esta entrega:
Primero que nada, es mi deber explicar que antes de la pandemia el saber callar y el disciplinarse era un seguro en política para el ascenso… la pandemia va a cambiar eso, hoy quien sepa tener integridad y no callarse es quien será bien visto por el electorado:
Por tanto, el electorado no percibirá confiables a todos esos jóvenes que pidan ser votados y queriéndose parecerse a los viejos… Sinaloa no querrá copias del pasado. Aunque sea reciente.
La clase política que vendrá, tiene que venir de la calle, tiene que traer el pulso de la gente, copias mal hechas de políticos no van a pasar… quien sepa leer a la calle y traer soluciones reales ¡Esos serán elegidos!
Los temas serán los mismos pero con otras caras: oportunidades, educación y seguridad… en ese orden… la gente que salga viva de esto va a querer volver a llenar el refri, querrá a sus hijos en las escuelas educándose para ser mejores y sobre todo que la policía los cuide… quien pueda explicarlo mejor lo tacharán en las boletas.
Quien no se calle, quien grite lo que pasa ¡Esa gente va a tener credibilidad! Lo que sigue es que digan que harán si llegan… credibilidad y opción esa será la formula para ser votados.
La gente no votará por la frivolidad, nadie se va a tragar historias falsas o imágenes prefabricadas. El electorado tendrá los 5 sentidos bien prendidos, sobre todo el olfato y lo que huela falso lo va a desechar.
Para el 2021, en esta pandemia no hay nada para nadie, el Presidente está cayendo en las percepciones, aunque eso no quiere decir que el PRI o el PAN estén muy bien, la realidad es que no han sabido ser oposición. Por eso Morena jugará a la división y salir con el mínimo optimo.
Aún así, el virus le puede bajar las defensas a cualquiera… ahorita.
Después de la cuarentena, la gente va a salir ávida de oír la verdad, el estar adentro de sus casas a la gente le aviva la intuición: saben cuando un político está posando de más para la foto, se dan cuenta cuando un político tiene miedo y ya nos estamos dando cuenta cuando un político trae el miedo respirándole en la espalda y quiere sacar raja por donde sea a costa de la pandemia y el miedo de los demás.
Lo dije en Twitter hace días:
“Esta pandemia va a desenmascarar a falsos mirlos blancos de la política y a otros ni siquiera les permitirá volar en el cielo que sueñan… Y todo por no saber leer el escenario. La tierra se está moviendo y se están viendo lentos.”
En el 2021, quien tenga integridad y no se calle será bien visto… y sobre todo sepa lo que tiene que hacer. Eso si, Sinaloa no va a votar por alguien que no sepa reconocer una deuda.
Y permítanme un tip, no soy epidemiólogo aunque soy economista:
Para reactivar una economía nacional o regional: si es que hubiese grandes deudores, es importante ¡Pagar lo que se debe! Si hay deudas y eres empresa o gobierno: ¡Paga lo que debes! Con eso generas ciclo, generas flujo y así se va la cadenita… el flujo genera derrama y la derrama consumo.
Nadie quiere deudas. La ecuación es sencilla y nos la enseñaron los Cubanos en la canción el Bodeguero: ¡Toma Chocolate paga lo que debes!
Pagar lo que se debe es lo que reactivaría la economía cuando hay grandes deudores… ¡Ah! Muy importante pero si nadie le debe a nadie ¡Entonces Sí! ¡A endeudarse! Y ahí si ¡Sálvese el que mejor tasa de interés agarre.
Y esto apenas va comenzando, lo bueno es que ya vamos viendo la salida…
