La inteligencia artificial es uno de los mayores retos para los próximos años en nuestra sociedad. Empoderar a la ciudadanía, formar talento, capacitar en las empresas e invertir en investigación y tecnología son áreas clave para el crecimiento y desarrollo de los países.
El crecimiento de la inteligencia artificial debe tener como base un enfoque en la preparación humana, con educación y formación constante. Es posible desarrollar programas de formación en línea mediante plataformas y cursos que ayuden a mejorar la especialización de las personas en el uso y aplicación de estos sistemas.
Otro de los factores importantes es invertir en infraestructura educativa, además de modificar los planes de estudio en todos los niveles, con el objetivo de preparar a las nuevas generaciones para enfrentar los cambios tecnológicos y adaptarse con rapidez a las demandas actuales del sector educativo y del mercado laboral.
Fortalecer la relación entre la iniciativa privada y la investigación, mediante pláticas y conferencias que impulsen el desarrollo de la inteligencia artificial en todos los ámbitos, es otra área de oportunidad para los países latinoamericanos. Así, se pueden generar oportunidades para que jóvenes en sus últimos años de formación participen en proyectos y se capaciten en IA, fortaleciendo sus habilidades.
Por otro lado, un aspecto fundamental para retener talento es invertir en entrenamiento, capacitación y ofrecer salarios competitivos al personal que necesita profesionalizarse en las nuevas tendencias tecnológicas.
¿Qué riesgos se enfrentan con la IA?
Uno de los mayores riesgos que enfrenta Latinoamérica es no lograr adaptarse a los cambios que conlleva la inteligencia artificial. Es urgente adaptar los marcos regulatorios para no quedar rezagados, además de atender los riesgos más reiterados, como la ciberseguridad y la protección de datos.
La ética en el uso de los datos, junto con la seguridad, forma parte de los desafíos más importantes de la inteligencia artificial. Las soluciones a los problemas de cada región deben surgir desde lo local. Latinoamérica no es igual que Estados Unidos o Europa: la cultura es un componente clave en el diseño, desarrollo y uso de las aplicaciones con IA.
El desarrollo de la inteligencia artificial tiene un impacto directo en los ámbitos económico, social, educativo, político y empresarial. Su potencial es positivo para mejorar el desarrollo de los países, siempre y cuando se planeen los pasos a seguir para fortalecer su inclusión en todos los sectores, evitando consecuencias que transgredan los derechos y la seguridad de la sociedad latinoamericana, sin dejar a nadie atrás.