Al momento

México

Entre emojis y silencios, ¿deveras nos comunicamos?

En estos tiempos modernos, hasta para decir “gracias” hay que saber usar emojis Si mandas un mensaje sin una carita sonriente, parece que estás enojado, y...

Víctor Torres, director general de Línea Directa
Línea Directa | Víctor Torres, director general de Línea Directa

En estos tiempos modernos, hasta para decir “gracias” hay que saber usar emojis

Si mandas un mensaje sin una carita sonriente, parece que estás enojado, y si le pones punto final algunos lo leen como si ya no quisieras seguir la conversación.

Y aunque la tecnología ha sido una bendición —porque nos acerca con quienes están lejos— también nos está alejando de quienes tenemos cerca.

Lo vemos en cualquier parte: hay familias que viven bajo el mismo techo, pero solo se mandan mensajes por el celular.

Conversaciones completas con puros íconos: la carita, el corazón, las manitas de gracias… Y ya.

Hoy existen más medios que nunca para comunicarnos, pero cada vez hablamos menos de lo que sentimos.

Nos cuesta mirar a los ojos, nos da pena hablar con claridad. Preferimos el texto breve, el audio rápido o el meme que diga lo que no nos atrevemos a expresar.

¿Y qué pasa con eso? Pues que muchas veces los malentendidos aumentan. Porque la palabra escrita no siempre refleja el tono ni la intención.

No todos interpretan igual un “ok” o un “nos vemos”. Lo que escribes de buena fe, alguien más lo puede leer como molestia.

La forma en que nos comunicamos ha cambiado. Ahora no basta con decir “gracias”, hay que acompañarlo de unas manitas juntas o un corazón.

Si mandas un “hola” sin carita feliz, parece que andas con cara larga.

¿Y qué tal los audios? Ya nadie quiere escribir, ahora te dejan un mensaje de 3 minutos que se escucha como si lo grabaran desde un tráiler en la carretera.

¿En qué momento comenzamos a dejar de lado la plática en casa o en un café? ¿A qué hora dejamos de decirnos las cosas de frente?

No se trata de satanizar el celular —por supuesto que no—, sino de recordar que nada reemplaza una conversación cara a cara.

Hay que hacer un esfuerzo. Volver al diálogo, aunque sea breve, y preguntar de verdad: “¿Cómo estás?”.

Ni el emoji más tierno ni el sticker más gracioso sustituyen el valor de una plática real.

 

Fuente: Internet

Fotografía de perfil de Víctor Torres

Víctor Torres

Columnista

Víctor Torres

Ver más

Al momento

Suscríbete a nuestro boletín

Para tener la información al momento, suscríbete a nuestro boletín en el tendrás las últimas noticias de Sinaloa, México y el mundo.