Si pensábamos que en años anteriores habíamos tenido arranques de ciclo escolar “históricos” o “únicos”, nos quedamos cortos y ninguno como el de este 2020. El inicio de este nuevo ciclo vaya que sí fue “sui generis” y quedará marcado para los anaqueles de la historia nacional.
Como absolutamente todos los aspectos de la vida humana, el ramo educativo también ha tenido que sufrir modificaciones ante la pandemia del COVID-19 y ayer iniciaron las clases en todo el país para 30 millones de estudiantes mexicanos, 586 mil de ellos sinaloenses. Pero no hubo honores a la bandera en los planteles, ni los gritos de felicidad de los reencuentros, ni pases de lista en los salones. No hubo un tráfico desquiciado en las calles y las escuelas lucieron vacías.
Las clases serán a distancia en el corto y quizá mediano plazo, hasta que mejoren las condiciones sanitarias. Muchas cosas fueron distintas, pero lo que no faltó fue el ánimo de los alumnos por retomar las actividades educativas. Que hubo dificultades, dudas, inquietudes y hasta fallas en la conectividad, por supuesto, y las seguirá habiendo en tanto continúe el modelo virtual.
El reto es enorme para todos, padres de familia, estudiantes, autoridades educativas y por supuesto los maestros. Para nadie será fácil, habrá tropezones pero habrá que saberse levantar y seguir adelante con el programa. Porque bien lo remarcó el titular de la SEP, Esteban Moctezuma (y en ello coincidió el gobernador Quirino Ordaz): peor sería paralizar la educación, como ha sucedido en otros países. En México, el aprendizaje no se va a detener. Y en esa misión todos debemos poner el mejor esfuerzo…
Casi dos meses y medio tardó el alcalde de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez, en cumplir con la sentencia emitida por el Tribunal Electoral de Sinaloa, que le ordenaba disculparse con la síndico procuradora, Elsa Isela Bojórquez Mascareño, por haber ejercido, de acuerdo a los magistrados, violencia política en razón de género y acoso laboral.
Desde el pasado 12 de junio el Tesin emitió el posicionamiento pero el “Químico” daba largas y largas, y Doña Elsa hasta tuvo que solicitar nuevamente la intervención del tribunal. Pero finalmente ayer lunes, durante una sesión extraordinaria de Cabildo –por Zoom, acorde a la nueva normalidad- llegó la tan esperada disculpa pública, y no solo por parte del presidente municipal, sino de varios de sus funcionarios.
El Oficial Mayor, el Tesorero, el director de Planeación, el titular del Órgano Interno de Control, el director de Recursos Humanos, el gerente general de la Jumapam y hasta el director del Instituto del Deporte hicieron lo propio y se disculparon. Esperemos que no sea un acto inocuo y que, tal y como dijo Bojórquez Mascareño, se aproveche la oportunidad para abrir puentes de comunicación y haya un mejor trabajo en equipo y entendimiento. En pocas palabras, que sea el fin de la época en que el alcalde y la síndica eran enemigos a muerte. ¿Será mucho pedir?
De mal en peor va el conflicto de la basura en Ahome. Este tema se ha manejado de una pésima manera por parte del gobierno de Manuel Guillermo Chapman. Recordemos que la semana pasada, tal y como se esperaba, el juez séptimo de distrito le ordenó al Ayuntamiento regresarle el relleno sanitario a PASA.
Ello no fue una sorpresa, era perfectamente previsible, pues a todas luces fue por completo ilegal cuando los policías municipales llegaron a dichas instalaciones y se apropiaron de ellas a la fuerza y mediante intimidaciones a los empleados de PASA. La administración de Chapman no tenía sustento jurídico para hacer eso… y el juez solo lo corroboró y lo hizo efectivo.
Sin embargo, ahora el problema es que la nueva empresa que tiene concesionado el servicio, OP Ecología, no tiene dónde depositar la basura. Pequeño problema. El Ayuntamiento entonces tendría que hacer un acuerdo con Promotora Ambiental (aunque no sea del agrado de Don Billy), y esperemos sea pronto porque bien dice la Coparmex que mientras Chapman, PASA y OP están agarrados del chongo, es la ciudadanía la que termina pagando los platos rotos. ¿O no?
En un embrollo está metida la Fiscalía General del Estado, tras la difusión de un video donde se observa a un supuesto Policía de Investigación agrediendo a cachetadas y con insultos a un chofer del transporte público en Culiacán.
Las imágenes, que se hicieron virales en las redes sociales, muestran la agresión del presunto agente (quien porta una camiseta polo con el logo de la Fiscalía y un arma) después de un incidente vial con el conductor de una unidad de la ruta Huizaches. El tema ha escalado y especialmente el sindicato de choferes no quita el dedo del renglón y pide que se finquen responsabilidades.
La FGE, en tanto, emitió un comunicado el pasado domingo, señalando que ya estaba investigando el caso… y hasta ahí se quedó. La verdad de las cosas, a estas alturas ya debería tener bien identificado si el agresor forma parte de sus filas o no, para en dado caso poder tomar cartas en el asunto. Se están viendo muy lentos pero la presión pública es intensa. Veremos en qué termina todo esto. Así se las gastan. O peor… Comentarios: [email protected]