Terminó el calendario regular de la Liga MX de Futbol, y viene ahora -después de otra tormentosa pausa- la famosa liguilla y su mediocre invento llamado “play inn”. ¿Que hubo sorpresas? Claro que las hubo: las de Chivas y el bicampeón América, que se colaron entre los diez primeros sin los méritos suficientes para aspirar al título.
Cruz Azul y una gran campaña en la que sus seguidores no recuerdan haber tenido una similar, dominó el torneo amasando 42 puntos y muy cerca de igualar la cosecha de unidades que lograron las Águilas ya hace buen rato. Para muchos, la máquina es el verdadero y genuino campeón, si medimos esto con lo correcto, que es el primer lugar en unidades alcanzadas como se estila en otras ligas del mundo (la de España, por ejemplo).
El Guadalajara y América tuvieron una actuación para el olvido y no para enmarcar. Los dos se beneficiaron del sistema para filtrarse entre los diez primeros, una rendija que, aún y su pobre desempeño, los coloca como aspirantes a un campeonato inmerecido porque, de conseguirlo, confirmaría una vez más que en México hasta jugando de manera irregular se pueden alcanzar las metas.
Mientras que el América tendrá dos oportunidades de estar en la liguilla, las Chivas se jugarán en un clásico tapatío (contra Atlas) el derecho de enfrentar al perdedor de Águilas y Xolos, para completar los ocho “invitados”.
Los capitalinos cerraron el torneo con una escandalosa derrota de 0-4 ante el Toluca, un juego que sirvió para medir realmente las posibilidades de soñar en un tricampeonato. Los Diablos fueron el segundo mejor equipo del torneo y esa goliza confirmó que, en este momento, o son ellos o es Tigres, los únicos que tienen argumentos para pelear la verdadera final con Cruz Azul.
Pero, ¡aguas! La liguilla es otro torneo en el que algunos equipos pueden crecerse. La historia en esa etapa ya contempla a equipos que pasando de panzazo han levantado el trofeo de campeones, y este no podría ser la excepción, con un Cruz Azul a quien de pronto lo invaden los fantasmas y termina “cruzazuleándola”.
Monterrey y Pumas avanzaron en cuarto y quinto, respectivamente. Ambos serán enemigos fuertes para cualquiera, menos para los tres arriba citados. El San Luis consiguió uno de los boletos y habrá que agradecerle la buena campaña que firmaron, pero de llegar a una posible final contra Cruz Azul creo que la perdería.
De los ocho ausentes nadie se merecía continuar con vida. Allí se quedaron estacionados aquellos que además de jugar muy mal no invirtieron mucho y solo fueron escuadras del montón. Para hacer bulto pues.