Tengo la impresión de que en Sinaloa la participación ciudadana en la jornada electoral del domingo próximo no será como para vanagloriarse, pero creo que aún podemos participar todos en la promoción de la asistencia a las urnas para que los ciudadanos expresen su voluntad.
Finalmente la emisión del voto sin presiones es la expresión más genuina del ciudadano de manifestar su respaldo o rechazo a un político o a un partido, el momento oportuno para reconocerle su congruencia y capacidad o rechazarlo por sus mentiras y sinvergüenzadas.
Pero además es el momento extraordinario en el que la opinión secreta del más humilde trabajador expresada en una papeleta y depositada en una urna vale lo mismo que la del más reconocido intelectual o la del más rico empresario. El voto es el derecho que nos iguala a todos los mexicanos sin condicionamientos.
En la elección de 2018 en general la participación ciudadana en sus diversas decisiones anduvo por el orden del 60 porciento, poco más en algunas, poco menos en otras.
Creo que se alcanzó un buen nivel, pero es difícil que se logre el 6 de junio, si partimos de que en 2018 la elección de desarrollo en un clima considerado como normal, sin pandemia, y que este año muchos ciudadanos, aún ya vacunados, pudieran tener sus reservas para acudir a las urnas.
Tengo la impresión de que por algunos factores como la pandemia, además de la ausencia directa de Andrés Manuel López Obrador en las boletas, que no de la elección, y la apatía propia de algunos segmentos de la sociedad, la participación ciudadana en las urnas el domingo próximo podría situarse por abajo del 50 porciento.
Hay a quienes les conviene que así sea. La posibilidad de manipulación de resultados mediante viejos vicios como la compra y coacción del voto es directamente proporcional a la baja participación ciudadana.
Ahí está el trabajo de los partidos políticos y de los candidatos. Algunas organizaciones empresariales y civiles se están dando a la tarea de promover la participación de los ciudadanos. Eso es bueno.
La jornada del domingo próximo es una gran oportunidad de acudir a las urnas y emitir nuestro voto, a favor del partido o del candidato al que le reconozcamos capacidad y congruencia, o en contra del que consideremos oportunista e incumplido. Nada más.
