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Candidatos, ¡respeten!

Este es mi último comentario antes del inicio formal de las campañas políticas en Sinaloa. Vale la pena hacer algunas consideraciones sobre el tema. Aunque consecuencia...

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Este es mi último comentario antes del inicio formal de las campañas políticas en Sinaloa. Vale la pena hacer algunas consideraciones sobre el tema.

Aunque consecuencia de la pandemia y el tiempo necesariamente serán campañas diferentes, es deseable que los candidatos reflexionen sobre sus estrategias de promoción y privilegien aquellas que lleven implícito el respeto a la dignidad de todas las personas, más la de aquellos más desprotegidos, más vulnerables.

Ojalá y hoy entiendan que ofenden las fotografías y videos que acostumbran distribuir abrazando a los más pobres, en las que morbosamente destacan sus carencias, su miseria.

Si esos pobres necesitados ofrecen una sonrisa franca en respuesta al abrazo del candidato, no es de ninguna manera felicidad por la presencia del aspirante, sino de elemental educación, cortesía, civilidad y a veces ingenuidad.

No expongan a esas familias necesitadas, vestidas humildemente frente a sus humildes viviendas. Ningún motivo justifica esa exhibición del infortunio y la penuria. ¿Es este un trato digno que beneficie a uno u a otro? Creo que no. Demerita la política y muestra la bajeza de quien a esta estrategia recurre.

Si van a entregar, como lo hacen, un bulto de lámina para reparar la miserable vivienda, no lo hagan mostrando las condiciones paupérrimas en la que ésta se encuentra. No viven en esas condiciones por gusto, sino porque en muchos de los casos hasta ahí los han empujado los malos gobiernos.

Si entregan una silla de ruedas a un discapacitado, ¿qué necesidad de mostrar las condiciones físicas tan mermadas de quien la recibe? Si lo hacen, sean prudentes y respeten su autoestima.

¿Qué necesidad de restregarle en su cara al necesitado sus limitaciones, su miseria, sus grandes carencias, en aras de querer aparecer como la materialización de la solidaridad y el desprendimiento?

¿Por qué valerse de esa imagen de aquellos que todo necesitan, de los más marginados en todo? ¿Qué mensaje es el que pretenden enviar? ¿Creen que publicar una fotografía con ellos les sirve para su promoción? ¿Acaso no será más motivo para que sientan ustedes vergüenza?

Respeten su dignidad y su condición de pobreza, si de antemano muchos saben que podrán tomarse con ellos mil fotografías, pero nada harán por sacarlos de la situación de miseria en la que ustedes como clase política, en este país de insensibles, y hasta de cínicos, los han refundido.

No agraven los excesos y abusos que padecen usándolos electoralmente. Y menos cuando no pocos de esos que buscan el voto ya lo han hecho en el pasado, que se venden hoy como la encarnación de la honestidad, aparecen ahora como nuevos ricos, pero en realidad en los hechos tendrán que pasar varias generaciones para que puedan sacudirse el estigma de ladrones.

Si no pueden aportar algo para sacarlos de la miseria, cuando menos respeten su dignidad.

Fuente: Internet

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