México.– Todo indica que nuevos cambios se avecinan en los materiales educativos impresos dirigidos a estudiantes del nivel básico, es decir, preescolar, primaria y secundaria, ya que este jueves 23 de febrero, la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación, publicó en el Diario Oficial de la Federación, los lineamientos generales para la innovación de los mismos.
En un amplio documento, la Mejoredu destacó que este análisis se realiza con el fin de contribuir al cumplimiento de los objetivos establecidos por el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación, al que le corresponde, entre otras funciones, emitir lineamientos relacionados con el desarrollo del magisterio, el desempeño escolar, los resultados de aprendizaje; así como de la mejora de las escuelas, organización y profesionalización de la gestión escolar.
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¿De qué trata la mejora continua de la educación? Recordemos que se activó desde el 2020 con los lineamientos referentes a los materiales y tecnologías educativas se orientan por las dimensiones: una educación aceptable y común, y una educación equitativa.
“Estos instrumentos buscan que los materiales fortalezcan la creatividad, un involucramiento participativo y la toma de decisiones en maestras, maestros y estudiantes: la innovación en los materiales educativos debe impulsar una educación participativa y libre […] innovaciones en el desarrollo de materiales educativos que permitan responder de forma pertinente a necesidades educativas diferenciadas, sin segregar, separar o excluir a nadie”, que den respuesta, de manera progresiva, a la diversidad de condiciones, necesidades y características de los docentes y estudiantes.
En este sentido, los lineamientos para iniciar el análisis tendientes a tener mejoras que cumplan con los compromisos pactados, de acuerdo al artículo 1 del documento, tienen por objeto establecer elementos que podrán contribuir en los procesos de innovación pedagógica, didáctica y editorial en los materiales educativos impresos para estudiantes, emitidos por la Secretaría de Educación Pública y las secretarías de educación (o instancias homólogas) en las entidades federativas, para apoyar, complementar y profundizar la puesta en práctica del plan y programas de estudio de preescolar, primaria y secundaria y con ello favorecer los procesos formativos que se desarrollan en las escuelas.
Para ello impulsará equipos de trabajo con la Secretaría de Educación Pública, secretarías estatales y otros actores para vigilar, analizar y decidir las innovaciones que como se estableció anteriormente, sean de beneficio e inclusivas para el nivel básico.
Los planteamientos didácticos de los contenidos en los materiales educativos impresos considerarán para su innovación a los siguientes aspectos:
- Apegarse a los enfoques, metodologías, propósitos y contenidos del plan y programas de estudio vigentes, según corresponda al nivel educativo;
- Ser accesibles y posibles de abordar por las comunidades escolares en la diversidad de sus contextos para favorecer la apropiación de conocimientos y el desarrollo de procesos formativos que permita a niñas, niños y adolescentes comprender su entorno local y global;
- Tener una secuencialidad y profundidad progresiva, de acuerdo con la naturaleza de los contenidos que se desarrollen, para posibilitar su continuidad y articulación con los conocimientos previos de los estudiantes, los saberes comunitarios y los libros de texto gratuitos, en el marco del plan y programas de estudio vigentes;
- Posibilitar una vinculación de contenidos de diferentes espacios curriculares;
- Considerar los enfoques actuales sobre los contenidos formativos y disciplinares, así como con los hallazgos en torno a la investigación didáctica y que sean acordes con el plan y programas vigentes;
- Ser flexibles en la definición del enfoque didáctico; solamente podría considerarse inadecuado un enfoque que fuera claramente opuesto al planteado en plan y programas de estudio vigentes;
- Presentar la información con un lenguaje cercano y adecuado al alumnado, evitando el uso excesivo de términos especializados, tecnicismos innecesarios, y deberá estar exento de errores conceptuales y disciplinares, y
- Considerar la existencia de diferentes perspectivas sociales, culturales, lingüísticas y epistemológicas, entre otras, de los diversos grupos que integran las sociedades actuales, como un elemento que complementa, contextualiza y da sentido a los procesos de enseñanza y aprendizaje.
