Chilpancingo, Gro.- El secretario de Salud de Guerrero, Lázaro Mazón Alonzo, reconoció que varias clínicas y centros de salud
permanecen cerrados por el temor de médicos y enfermeras de ser
plagiados o extorsionados por la delincuencia organizada, principalmente
en la región de la Tierra Caliente.
Informó que la Secretaría de Salud tiene el reporte de que en ultimas
fechas ocho centros de salud se encuentran cerrados a consecuencias de
la inseguridad pública.
En estos casos dijo que los médicos se niegan a
regresar a sus centros de trabajo, por temor a ser agredidos o
extorsionados por la delincuencia organizada, lo que en consecuencia
mantienen sin atención médica a cientos de familias guerrerenses,
principalmente de aquellas zonas con alta incidencia delictiva.
Indicó que para resarcir las afectación, la dependencia estatal ha
enviado brigadas móviles para brindar el servicio a la población
afectada doblemente por la inseguridad.
El titular de la dependencia estatal, señaló que derivado de la
inseguridad pública varios médicos han solicitado su cambio de
adscripción a otras zonas del estado, lo que aseguró no ha afectado la
prestación de servicios en el sector salud.
“Hoy tener ocho centros de salud, es un asunto mínimo a diferencia de
los 40 centros de salud que se mantenían sin atención hace año y medio”
apuntó.
A pesar de este problema Mazón Alonzon comentó que esta garantizada la
atención médica en Guerrero, la cual actualmente alcanza el 96 por
ciento, al igual que el abasto de medicamentos y se ha dado especial
atención a las poblaciones indígenas.
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