Tlahuiltolpec, Oax.- El director del Cuerpo de Bomberos de Oaxaca, Manuel Maza Sánchez,
adelantó que podrían fincársele responsabilidades a la autoridad comunal
de Santa María Tlahuitoltepec, por generar una falsa alerta sobre el
derrumbe de ayer en ese municipio.
La víspera, Donato Vargas, secretario del Comisariado de Bienes
Comunales, advirtió a las autoridades estatales que el derrumbe de un
cerro habría sepultado al menos 300 casas dejando entre 500 y mil
personas muertas.
Esa información generó la movilización de las fuerzas armadas, cuerpos
de rescate y de Protección Civil del orden federal y estatal hacia esa
zona mixe.
“Los remanentes de la depresión tropical Matthew dejaron una
decena de puentes dañados además de una veintena de pueblos que están
semicomunicados en el Valle Central, por que el desplazamiento a esta
zona distrajo la atención a otras partes de la entidad”, explicó Maza
Sánchez.
Ayer, durante varias horas, cuerpos de rescate, el gobernador, Ulises
Ruiz, y el secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, intentaron
acceder a esa región, parcialmente incomunicada por derrumbes en las
carreteras y el debilitamiento de un puente.
Ya por la tarde, las autoridades reportaron que no había muertos, sino
11 personas desaparecidas, y que las casas sepultadas no eran 300, sino
dos.
El derrumbe ocurrido en el Barrio San Pablo cayó sobre las viviendas
ocupadas por los adultos: Hérculano Hernández Pacheco, Eduardo y
Carolina, además de los adolescentes José Luis de 15 años; Verónica de
13 años, Teodora y Ramón 12 y 17 años, respectivamente.
Durante un recorrido por la zona afectada, ubicada a 150 kilómetros de
la ciudad de Oaxaca, se confirmó que el secretario de Seguridad Pública,
Jorge Alberto Quezadas, buscó a Vargas con el objetivo de que explicara
qué lo llevó a magnificar el acontecimiento registrado a las 3:00 horas
por el reblandecimiento de la tierra.
“Tememos que las personas desaparecidas estén sepultadas dentro de sus
viviendas porque ya las hemos buscado en lugares cercanos”, aseguró
Vargas a la dirección del Instituto Estatal de Protección Civil.
Al lugar llegaron unas 600 personas, entre brigadas de la Secretaría de
Marina, del Ejército, el cuerpo de rescate conocido como “topos” y
Protección Civil del estado, además de asociaciones civiles y
particulares solidarios con la causa mixe.