Ciudad de México.- En medio de la incertidumbre y de un fuerte operativo de seguridad, llegó
Enrique Peña Nieto, gobernador del Estado de México, a escuchar el Cuarto
Informe del jefe de gobierno, Marcelo Ebrard.
El protocolo del informe dio inicio y el gobernador del Estado de México no
llegaba, pasaron los minutos, horas y Peña Nieto no arribaba. Entre los
reporteros se corría el rumor de que no vendría, pero se aseguraba que no podía
ser descortés debido a que el jefe de gobierno capitalino asistió a su Quinto
Informe de Gobierno.
Que venía en una camioneta azul, que en una blanca, que en una negra, no que
llega en helicóptero, se decía en la calles de Donceles. Cualquier camioneta o
carro que se veía a lo lejos, los reporteros preparaban cámaras, videocámaras y
grabadoras. No, no es, se decía, el gremio periodístico comenzaba a
desesperarse.
Otros platicaban que ya lo había metido por otro lado, unos más afirmaban que
vendría porque ya había muchos guardaespaldas, pura especulación.
Fue minutos antes de que Marcelo Ebrard subiera a tribuna cuando pareció por
la calle de Donceles el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto,
acompañado de mandatario de Hidalgo, Miguel Osorio Chog, ambos resguardados por
un fuerte operativo de seguridad.
Fue recibido entre abucheos y protestas: ¡Ni PRI, ni PAN, poder popular!
coreaba la gente al paso de Peña Nieto a la Asamblea Legislativa.
Peña Nieto calificó “de buena relación” la que hay con el gobierno capitalino
y destacó la coordinación que hay entre las entidades de Hidalgo, estado de
México y el DF.
“La coordinación de estas tres entidades está favoreciendo el impulso de
proyectos que está sirviendo al área metropolitana”, comentó.
A su paso rumbo a la entrada a la asamblea fue abucheado con consignas en
contra del PRI.
Peña Nieto llega en último momento
Minutos antes de que Ebrard iniciará su discurso ante el pleno de la ALDF, el gobernador priista arribo al recinto de Donceles ante el asombro de quienes pensaban que ya no llegaría
Fuente: Internet