?Washington.- La jefa del Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos (DHS), Janet
Napolitano, dijo que no fue informada de la implementación del operativo “Rápido
y Furioso” por parte de la ATF, y que permitió la entrada de miles de armas a
territorio mexicano.
Durante una audiencia ante el Comité Senatorial de Justicia, el republicano
de más alto rango, Charles Grassley, acusó a la ATF de haber contribuido a la
violencia que castiga a México al haber permitido de forma deliberada el
contrabando de casi 2 mil armas como parte de la operación “Rápido y Furioso”.
En un cara a cara con Janet Napolitano, Grassley consideró que, con este tipo
de “operaciones arriesgadas” y “mal concebidas”, se “ha afectado la vida de
incontables personas” que terminaron en calidad de víctimas por haber permitido
que estas armas “terminaran en manos de criminales”.
Grassley, quien ha solicitado en vano varios memorandums internos, en los que
algunos agentes de la ATF se mostraron contrarios a la decisión de dejar pasar
cargamentos de armas a México para tratar de descubrir y desmantelar a los
responsables y beneficiarios de la cadena del contrabando, fue incapaz de
obtener mayores respuestas de Janet Napolitano quien insistió que dicho
operativo “aún se encuentra bajo investigación”.
Napolitano señaló en la audiencia que se enteró de la operación “Rápido y
Furioso” que implementó la ATF a raíz de la muerte de los agentes Brian Terry y el de
Jaime Zapata
recientemente en San Luis Potosí, México.