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México.– Desde que se comenzó con la aplicación de las vacunas contra el COVID-19 ha habido muchas especulaciones al respecto, sobre todo con las secuelas y/o síntomas que presenta nuestro cuerpo después de recibir la dosis.
Los expertos dicen que de 12 a 14 meses después de la aplicación de la vacuna antiCOVID es el tiempo más que suficiente para que surjan los efectos secundarios.
Pues aunque las vacunas antiCOVID son relativamente nuevas, los procesos que se desencadenan en nuestro cuerpo no lo son.
El comprender cómo estas vacunas estimulan a nuestro sistema inmunológico puede ayudarnos a saber que tan rápido podemos esperar a tener reacciones negativas.
Estas son las cuatro fases que experimenta nuestro cuerpo después de recibir la vacuna contra el coronavirus:
- Después de 15 minutos:
Algunas personas tendrán una reacción alérgica a los ingredientes de la vacuna, lo cual ocurrirá en este periodo de tiempo, es decir, durante los 15 minutos posteriores a la aplicación; sin embargo, para otras los efectos secundarios son el resultado de que el cuerpo reaccione a la vacuna en sí o a los anticuerpos que tu cuerpo produzca.
- Fase innata, después de algunas horas:
Esta fase es en la que el cuerpo comienza a reaccionar ante la vacuna en sí, por lo que nuestro cuerpo reconoce a un invasor y lo ataca con células inmunitarias, las armas que usaría contra cualquier virus o bacteria. Cualquier reacción asociada a esta fase ocurrirá en cuestión de horas o en un par de días, incluidos los efectos secundarios más comunes que son: dolor en el brazo, fiebre y otros síntomas leves similares a los de la gripe.
- Fase adaptativa, después de 10 días:
En esta fase que comienza 10 días después de la inoculación, que es lo que tarda en surgir efecto la vacuna para proteger contra el COVID, nuestro cuerpo comienza a producir células que están diseñadas específicamente para combatir el virus objetivo.
- A los 28 días:
Después de que la fase de adaptación desaparece, aproximadamente eso sucede de 28 días a un mes, quedan células de memoria en tu cuerpo que te brindan protección durante meses o años después de la exposición inicial, pero no ocurre ninguna respuesta nueva.
“Se han administrado miles de millones de dosis, por lo que cualquier efecto secundario que aún no se haya visto sería más inusual que uno en mil millones”, comentó el epidemiólogo Chandrakant Lahariya.
