Chiapas. Este domingo, cientos de indígenas tzotzil y tzeltal marcharon en Chenalhó, Chiapas, para exigir justicia por el asesinato del sacerdote Marcelo Pérez y pedir al Gobierno federal la desactivación de los grupos criminales que han desplazado a sus comunidades.
La protesta, que también exigió el retorno seguro de los desplazados, fue convocada por la Diócesis de San Cristóbal y organizaciones defensoras de derechos humanos.
Enrique Díaz Sánchez, párroco de San Pedro, destacó que la violencia ha dejado numerosas personas desplazadas y hogares quemados.
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“Nosotros buscamos que haya seguridad de nuestros pueblos y no solo en esta región, sino en diferentes partes del estado de Chiapas“, dijo.
A tres meses del asesinato del padre Marcelo Pérez, los manifestantes recordaron que aún no ha llegado la justicia para él.
Durante la marcha, las consignas fueron claras: “¡Gobierno, decide tu postura: estás con el pueblo o estás con el crimen””. “¡Alto a los proyectos de muerte¡”. “¡Alto al desplazamiento Forzado!”, “¡Alto al crimen Organizado!”.
La protesta culminó en un mitin en el que se exigió al Gobierno actuar frente a la escalada de violencia que afecta a Chiapas, un estado donde la guerra civil provocada por el crimen organizado sigue sin control.