Sinaloa.- Los ocho cementerios más antiguos del estado de Sinaloa, creados en siglo XIX y parte del XX, característicos por su estilo neoclásico, recibirán trabajos de mantenimiento por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH-Conaculta) y la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).Mediante el Programa de Empleo Temporal, se atenderán 37 sitios históricos de Sinaloa, entre los que destacan los centros históricos de los municipios de Escuinapa, Elota y Culiacán, así como las zonas arqueológicas Cerro de La Máscara y Las Labradas, detalló el INAH en un comunicado.Desde abril pasado “comenzaron las labores de limpieza general, consolidación, resane y pintura de los 37 espacios que se remozarán este año, entre los que se destacan los dos cementerios más antiguos de Sinaloa, el Español y Chametla, ubicados en el municipio El Rosario, y que datan de las tres primeras décadas del siglo XIX”, explicó la arqueóloga Ángeles Heredia, directora del Centro INAH-Sinaloa, quien informó que para tales labores se han destinado cuatro millones 755 mil pesos, que a su vez generan más de 76 mil jornales.Las bardas y tumbas de los cementerios Español y Chametla fueron limpiadas y consolidadas durante tres meses, con la participación de habitantes de las comunidades aledañas y bajo la supervisión de especialistas del INAH.En el caso del Panteón Español, ubicado en la cabecera municipal de El Rosario, la investigadora informó que se construyó en 1830 y ha sido utilizado únicamente por los primeros europeos asentados en esta región y por sus descendientes. Por eso está principalmente ocupado por difuntos de las familias Fletes, Cibrián y Noris, entre otras.En este cementerio, comentó la arqueóloga del INAH, se conservan 30 tumbas con más de 100 años de antigüedad, algunas de las cuales fueron construidas a principios del siglo XIX bajo un estilo implementado por la orden jesuita, que consistía en grandes bóvedas hechas con ladrillo y revestidas con mármol.Este tipo de construcciones responden a la costumbre religiosa implementado en la Colonia , que tenía la creencia de que al enterrar a los difuntos en los atrios de las iglesias llegarían más rápido al cielo; a principios del siglo XIX esta práctica fue prohibida y se optó por sepultarlos en tumbas que simularan los templos, explicó Heredia, de acuerdo con el comunicado del INAH.Agregó: “Además la mayoría de estas tumbas también son de mármol, en tanto que las más tardías, construidas casi en la mitad del siglo pasado, son de cantera”.Respecto al panteón Chametla, ubicado en el poblado del mismo nombre, las 20 tumbas con una antigüedad mayor a cien años que aún se conservan, son más sencillas respecto a las del panteón Español, la mayoría son de cemento y en unos cuantos casos de cantera, el lugar fue destinado para enterrar a la gente de bajo nivel social, indicó la titular del Centro INAH-Sinaloa.Las labores de mantenimiento también se han realizado en los panteones de las localidades de Leyva, Ahome, El Fuerte y San Ignacio.”Actualmente se continúa con este trabajo en los cementerios de las poblaciones de Ocorini y Pánuco, cuyos mausoleos de cantera y mármol también presentan un estilo preponderantemente neoclásico”, dijo.Además de la atención de la arquitectura funeraria de Sinaloa, se realizan labores de mejoramiento de la imagen urbana de las cabeceras municipales de El Rosario, Escuinapa y Elota, donde se han llevado a cabo trabajos de limpieza, consolidación de aplanados y repintado de las fachadas de varios edificios históricos, construidos en el siglo XIX y principios del XX.Este mantenimiento también se ha efectuado en las calles principales, plazas y quioscos de los centros históricos de San Blas, Guamúchil, Mocorito, Pericos, Concordia, Badiraguato, Ocorini, Cabazán, Guasave, Sinaloa de Leyva y San Ignacio.Por lo que respecta a los sitios arqueológicos, la especialista detalló que se han realizado trabajos de limpieza y colocación de una cerca perimetral en la zona Juana Gómez, ubicada en el municipio de Escuinapa, además de que se aplican labores de limpieza y para retirar yerba en sitios arqueológicos con petrograbados, como es el caso de Cerro de La Máscara, en el municipio El Fuerte; Las Labradas, en San Ignacio; Cueva La Rinconada , en Ahome, al igual que Cerro Verde y Tecuyo, en Elota.
INAH rehabilita panteones antiguos de Sinaloa
Estas construcciones responden a la costumbre religiosa de la Colonia, con la creencia que al enterrar los difuntos en los atrios de las iglesias llegarían más rápido al cielo
Fuente: Internet