Federales atrapan a operador de La Barbie

?Ciudad de México.- Agentes de la Policía Federal detuvieron en Puente de Ixtla, Morelos, a Juan Torres Salazar, alias Banda, presunto operador de Edgar Valdez Villarreal, alias La Barbie en ese estadio, informó la Secretaría de Seguridad Pública federal. A través de un comunicado, refirió que derivado de labores de inteligencia realizadas en Morelos, para la desarticulación de la organización de La Barbie, se identificó a Torres Salazar cuando viajaba a bordo de un automóvil VW Bora blanco, con reporte de robo en Amacuzac. Según el reporte, es presunto responsable de la muerte de Mario Alberto Chávez Traconi, alias El Rey del Fraude, y dos custodios más ocurrida el 10 de agosto de 2010. Torres Salazar fue detenido en compañía de Víctor Manuel Román Valladarez, alias Manolo, de 24 años, quien presuntamente se encargaba de cuidar una propiedad donde vendían droga. Banda tenía como principal actividad la distribución de droga en la zona poniente de Morelos y también se encargaba de extorsionar y asesinar a personas ajenas a su organización para afianzar el control de su territorio. De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública federal, reportes de inteligencia señalan que Torres Salazar colocó mantas con mensajes en diversos municipios, como la localizada en el Municipio de Puente de Ixtla el 15 de abril, en la cual se acusa a El Grande de asesinar a gente inocente. Además, presuntamente cometió una serie de homicidios en el estado de Morelos, ordenados por Irving Solano Vera, alias Gato, y Mauro González Escorcia, alias El Coyote, en el 2010 se le vincula con aproximadamente 40 muertes. También se tiene conocimiento que Banda se encargaba de privar de la vida a los integrantes de su propia organización que no cumplían con lo ordenado o realizaban otras actividades sin su autorización. La SSPF detalló que líneas de investigación indican que Torres Salazar ingresó primero a la organización de los Beltrán Leyva por invitación de Ricardo Terrones Rodríguez, alias Chaparrito, detenido el 4 de enero de 2010. En este periodo, Torres Salazar trabajaba para los hermanos Mario y Alberto Pineda Villa en Morelos, fortaleciendo sus actividades como presunto homicida y jefe de seguridad, expuso la dependencia. “Posteriormente se le encomendó la zona Poniente del estado de Morelos, que comprende los municipios de Miacatlán, Alpuyeca, Pilcaya, Puente de Ixtla, Amacuzac, Tequesquitengo, Xoxocotla, Tetecala, Temixco y Coatlán del Río, donde logró consolidarse distribuyendo grandes cantidades de droga mediante diversos operadores”, refirió. La SSPF agregó que se tiene conocimiento que a las personas que vendían droga sin autorización de Torres Salazar les cobraban una multa de 50 mil a 100 mil pesos. Con el paso del tiempo, se le proporcionaron mayores recursos económicos y materiales, como armas largas y vehículos para sus rutas de traslado, agregó la Secretaría. “Posterior a la muerte de Arturo Beltrán en diciembre de 2009, Juan Torres estuvo encargado de vigilar las rutas de traslado de Ricardo Terrones hasta su detención en enero de 2010”, añadió. Tras la detención de Gerardo Álvarez Vázquez, alias El Indio, Torres Salazar coordinó la llegada a Morelos de diversos de sus operadores encabezados por Jorge Luis Herrera Trujillo, Panda, procedentes de la ciudad de México, con la finalidad de hospedarlos temporalmente. Sin embargo, abundó la SSPF, derivado del trabajo de inteligencia, Herrera Trujillo fue detenido por la Policía Federal el 23 de abril en Amacuzac, Morelos. La dependencia federal expuso en el comunicado que Carlos Raúl Rojas Vallejo, alias, El Changoleón, manifestó cuando fue detenido, el 29 de marzo, en el Higuerón en Jojutla, Morelos, que Torres fungió como encargado de enterrar alrededor de 100 cadáveres de integrantes de grupos antagónicos en el cerro de Puente de Ixtla. Juan Torres, incorporó a sus actividades ilícitas el delito de secuestro para obtener mayores recursos económicos, manifestó la SSPF. El detenido presuntamente negociaba directamente el pago del rescate, pero en la mayoría de las ocasiones mataba a sus víctimas y enterraba para no llamar la atención. Banda fue de los primeros en reclutar nuevo personal para la organización de La Barbie, fortaleciendo los grupos de seguridad y sicarios, adiestrándolos para enfrentamientos con otros grupos criminales. A los detenidos se les aseguraron un arma larga; un rifle R-15; una pistola 9 mm, adaptada con silenciador; once cartuchos calibre 9 mm; 28 cartuchos para fusil AR-15; dos cargadores abastecidos, con un total de 28 cartuchos; dos paquetes de droga; seis teléfonos celulares; ocho chips para teléfono celular, y dos libretas.