Desalojan plaza pública del platón de indígenas en Oaxaca

Oaxaca.- Las fuerzas estatales de seguridad
despejaron la plaza pública central de la ciudad de Oaxaca y los
corredores del palacio de gobierno donde se encontraban desde hace dos
años un plantón de mujeres y niños indígenas desplazados de la región
triqui.
El gobernador Gabino Cué, aseguró que no iba a ceder a chantajes
como los que pretendían triquis de San Juan Copala, a quienes fueron
despejados de la zona del zócalo.
Dijo que los manifestantes exigían hasta la entrega de 15 mil pesos
mensuales para cada una de las 200 familias que aseguraron que había en
este lugar para liberar la zona.
“Por eso se tuvo que tomar la decisión complicada de utilizar a la
fuerza pública pero en el marco del Derecho y del respeto a sus
garantías”, confió.
Dejó claro que la sociedad también requería que el zócalo quedara
libre para disfrutar del espacio y de los festejos como la Noche de
Rábano, por eso se aseguró la zona con el resguardo de la policía
estatal.
Señaló que el gobierno no podía ceder a las intenciones de grupos que
solo buscan beneficios personales, pues muchos aprovechan este tipo de
festividades para obtener algún beneficio.
En tanto, el arzobispo de la diócesis de Antequera José Luis Chávez
Botello, lanzó un llamado a los indígenas triquis para no lucrar con su
situación, evitando inculcar en los niños formas violentas de actuar,
como odio y rencor.
Lamentó que los manifestantes hayan utilizado como escudos humanos a
sus propios menores para evitar ser desalojados por la fuerza pública.
“Es bueno que sea por medio de la paz, del respeto como se
manifiesten las ideas porque es en beneficio del país”, señaló al
término de su homilía de domingo.
Cuando alguien exige, pide algo y no quiere componer su actitud, es
lamentable, como el caso de los indígenas triquis. Porque las demandas
deben ser coherentes, llevar la verdad y al amor.
Asimismo, por el desalojo que ese grupo sufrió señaló que en cualquier situación hay canales para evitar dañar a alguna persona.
Sin embargo, también apeló a que no se dañen los derechos de terceras personas, sobre todo porque es una temporada de fiesta.
En este caso hizo el llamado a respetar a los niños, no inyectar
maneras de agresividad o formas de pensar que los demás son enemigos
nuestros.
Ante cualquier injusticia no se puede utilizar a este sector, “ni los
niños, ni ancianos ni enfermos que son los más débiles se vayan usando
de esa manera”, convocó.
A unas horas de celebrarse la Navidad, pidió rescatar y vivir su
sentido auténtico, para encontrar el camino seguro de vidas sanas,
útiles y realizadas. “Nos haría bien abrir los ojos y analizar que todo
mundo se moviliza por diversos motivos”.
Acompañado del rector de la Catedral, Carlos Franco Méndez, dijo que
todos estamos comprometidos con este tiempo, con la humanidad. “Celebrar
la Navidad en su sentido auténtico puede cambiar la situación de las
familias”. Cada familia, cada comunidad.NE