Estados Unidos.- Un residente de Laredo de 39 años se declaró culpable por su participación en un plan para comprar varias armas de fuego a través de intermediarios, anunció el fiscal federal Nicholas J. Ganjei.
Entre febrero de 2021 y julio de 2021, Jesús Guadalupe Covarrubias ayudó e instigó la compra fantasma de varios rifles.
En julio de 2021, las autoridades descubrieron el robo de aproximadamente 10 rifles tipo AK y 20 tipo AR en un rancho propiedad de Covarrubias. Como delincuente convicto, Covarrubias tiene prohibido poseer armas de fuego o municiones según la ley federal.
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Una investigación posterior condujo a las autoridades a su residencia en Laredo, donde observaron a Covarrubias y a otros colocando objetos en vehículos cercanos. Covarrubias salió de la casa con otras dos personas y se dirigió a una segunda vivienda.
En ese lugar, las autoridades observaron el movimiento de tres rifles desde una camioneta hacia la casa y detuvieron a Covarrubias y a otros.
Covarrubias admitió saber que era un delincuente convicto y que no podía poseer armas de fuego ni municiones. Como parte de su declaración de culpabilidad, reconoció haber enviado a otras personas a tiendas a comprar armas de fuego en su nombre..
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Tras su arresto en agosto de 2021, a Covarrubias se le permitió la libertad bajo fianza, pero huyó a México. Las autoridades finalmente lo arrestaron. Fue devuelto a las autoridades estadounidenses el 21 de febrero.
“Este caso es un importante recordatorio para los criminales de que pueden huir de la justicia, pero no pueden esconderse”, dijo Ganjei. “El Distrito Sur de Texas agradece los esfuerzos de todos aquellos, tanto en Estados Unidos como en México, que lograron la extradición del Sr. Corvarrubias para que pudiera enfrentar la justicia”.
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“La compra a través de testaferros no solo constituye una violación directa de la ley, sino que también pone en peligro a nuestras comunidades al permitir que personas con armas de fuego tengan acceso a ellas”, declaró el agente especial a cargo Michael Weddel de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF). “Estas peligrosas acciones ponen en peligro la seguridad pública y socavan la confianza que depositamos en nuestro sistema judicial. Es imperativo que rindamos cuentas a quienes participan en la compra a través de testaferros, garantizando el cumplimiento de nuestras leyes y la aplicación de la justicia para prevenir el flujo ilegal de armas de fuego a manos equivocadas”.
La jueza federal de distrito Diana Saldaña dictará sentencia posteriormente. En ese momento, Covarrubias enfrenta hasta 10 años de prisión federal y una posible multa máxima de $250,000.
