MÉXICO.- La Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha recibido una solicitud con la que podría bajar la tarifa de pago en el recibo de luz y beneficiar el bolsillo de todos los mexicanos. Esto luego de que durante el mes de agosto se haya pedido a la CFE que pusiera atención en ciertas zonas de México, donde las cuotas que se cobran por el consumo eléctrico son mayores a las que sus ciudades vecinas pagan.
Fue durante la conferencia mañanera de Andrés Manuel López Obrador que se informó que se analiza la propuesta enviada a la CFE para que se anime a bajar la tarifa de pago para los habitantes en ciertas zonas del país. El mandatario espera que la Comisión Federal de Electricidad le dé prioridad a este asunto para que los pobladores de las regiones que buscan un cambio, puedan ahorrar dinero por el consumo de luz desde el mes de agosto.
Te sugerimos: ¡El recibo de la CFE aumenta en agosto! Estos son los costos de consumo de tus aparatos en el hogar
Vale la pena recordar que la tarifa de CFE se aplica por zonas, es decir, algunas regiones dentro del mismo estado pueden tener un pago más alto que en otras.
La propuesta del presidente de México ha sido bien recibida por la población local, que ha estado solicitando un ajuste en la tarifa desde hace ya algún tiempo. Actualmente, las zonas en cuestión están clasificadas como 1B en el esquema de tarifas eléctricas de la CFE.
Esta petición se basa en la creencia de que una reducción en las tarifas contribuiría significativamente a mejorar la calidad de vida de la población y a promover el desarrollo económico de la región. Las zonas en las que podría bajar la tarifa de pago en el recibo de luz de la CFE son las que comprenden los alrededores del Río Pánuco, el cual cruza Veracruz, Tamaulipas y algunos municipios de San Luis.
Pese a que se busca que estas zonas paguen menos en el recibo de luz a partir de agosto, las tarifas eléctricas son el resultado de diversos factores, incluyendo los costos de generación, distribución y mantenimiento de la infraestructura eléctrica. Por lo tanto, cualquier ajuste en las tarifas debe ser evaluado minuciosamente para asegurar que la operación y sostenibilidad del sistema eléctrico no se vean comprometidas.
