México.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, volvió a lanzarse en contra del empresario Ricardo Salinas Pliego con quien ha intercambiado declaraciones durante los últimos meses y aunque aseguró que “no es nada personal”, volvió a arremeter en su contra y dejó en claro que a él le daría vergüenza subirse a un yate de lujo como el que usa el empresario, cuando México tiene mucha gente en la pobreza.
Desde la conferencia matutina en Palacio Nacional, el mandatario se volvió a lanzar contra el empresario y recordó el adeudo de miles de millones de pesos que adeuda al fisco y aunque dijo respetar su forma de vida, aclaró que a él le dan felicidad cosas más simples como haber reducido la pobreza y la desigualdad en México.
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“A mi me daría pena, lo digo sinceramente sin ofender, me daría vergüenza subirme a un yate de esos en un país con tanta pobreza, pero cada quien es libre, o sea, yo soy feliz con otras cosas, soy feliz leyendo un libro, comiéndome un frijol con chicharrón, con un tlacoyo, bañándome en una cascada, soy feliz recorriendo los pueblos, abrazando a la gente, me da muchísima felicidad, se me quita hasta el cansancio, se imaginan la felicidad que me produce, eso no me lo da ni todo el oro del mundo“, recalcó.
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López Obrador recalcó ante los medios de comunicación que ya se puede “morir tranquilo” porque logró su cometido de reducir la pobreza y la desigualdad de millones de mexicanos y esas son las cosas que lo hacen feliz.
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“Que yo sea presidente y que pueda decir en que el tiempo en que fui presidente reduje la pobreza de millones de mexicanos, qué hay más importante que eso, ya me puedo morir tranquilo, para un luchador social, para un humanista el poder constatar que se ayuda al prójimo, pero que además no solo es el discurso, sino la realidad, los hechos, pero respeto a todos”, destacó.