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México.- Sumando ya más de dos años desde el inicio de la pandemia, el COVID-19 y sus múltiples variantes continúan afectando en distintas formas a la población, incluso a los niños, quienes además de ser propensos a contraer la enfermedad, han visto su vida transformada por completo debido a los estrictos protocolos de bioseguridad.
Siguiendo esto, un grupo de expertos ha descubierto que tras la aparición de la variante Ómicron hacia finales de 2021, los niños empezaron a desarrollar un nuevo síntoma conocido como ‘Crup’ o también como laringotraqueobronquitis.
Han sido los médicos del Boston Children’s Hospital en Estados Unidos, quienes destacaron en su informe que al menos 75 niños han acudido hasta el centro hospitalario con laringotraqueobronquitis y COVID-19 simultáneo, aunque el fenómeno se presentó principalmente ante la llegada de la variante Ómicron al país estadounidense, sumando así un 80% de los casos.
Lo más preocupante de este hallazgo es que algunos casos fueron sorprendentemente graves y los niños requirieron hospitalización y más dosis de medicamentos en comparación con la laringotraqueobronquitis causada por otros virus. Al respecto, el doctor Ryan Brewster indicó:
Hubo una delimitación muy clara desde el momento en que la ómicron se convirtió en la variante dominante hasta el momento en que empezamos a ver un aumento en el número de pacientes con laringotraqueobronquitis
¿Qué es el ‘Crup’, nuevo síntoma que afecta a los niños con COVID-19?
La Crup o laringotraqueobronquitis en niños es conocida médicamente como laringotraqueitis y es una enfermedad respiratoria común en bebés y niños pequeños. Esta se caracteriza por una tos muy particular y una inhalación ruidosa y aguda.
Esta causa una inflamación e hinchazón alrededor de la laringe, la tráquea y los bronquios. Y, cuando es muy grave, puede restringir peligrosamente la respiración de los pacientes, en este caso, niños infectados con COVID-19.
