Ciudad de México.- Este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto para acabar con las condonaciones de impuestos a grandes contribuyentes.
Acusó que la situación era preocupante pues en los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto se condonaron cerca de 400 mil millones de pesos a grandes empresas, evitando que entrara ese dinero a las arcas federales.
Durante su conferencia de prensa matutina, el Ejecutivo federal calificó la condonación fiscal como un “huachicol de cuello blanco” para las finanzas públicas.
“Se ha abusado y se va a eliminar esta práctica, en dos sexenios se condonaron a grandes contribuyentes alrededor de 400 mil millones de pesos, es como un huachicol de cuello blanco que se va a eliminar”.
Desde Palacio Nacional, el mandatario dijo que el objetivo del decreto es acabar con privilegios fiscales y hacer valer la Constitución en letra y espíritu.
“Tienen que contribuir más los que obtiene más ingresos, en este caso, muy al contrario, los de mero arriba en algunos casos, no pagaban impuestos o cuando pagaban se les devolvían, eso se termina a partir del día de hoy”, subrayó.
Margarita Ríos-Farjat, titular del Servicio de Administración Tributaria (SAT), precisó que entre 2007 y 2012 (con Calderón), el gobierno federal condonó 161 mil 931 pesos a 153 mil 530 contribuyentes. Y de 2013 a 2018 (con Peña Nieto) condonó 238 mil 971 millones a 135 mil 228 contribuyentes.
De acuerdo con el nuevo documento, el Jefe del Ejecutivo federal se compromete a no otorgar mediante decretos presidenciales o cualquier otra disposición legal o administrativa, condonaciones, o a eximir, total o parcialmente, el pago de contribuciones y sus accesorios a grandes contribuyentes de deudores fiscales.
Lo anterior dejará de ser aplicable únicamente en los siguientes casos: aquellos que hayan afectado o traten de impedir que se afecte la situación de algún lugar o región del país, una rama de actividad, la producción o venta de productos, o la realización de una actividad, y catástrofes sufridas por fenómenos metereológicos, plagas o epidemias, caso en el cual se ejercerá dicha facultad en beneficio de la población afectada.