México.- Horrendo hallazgo de los habitantes del poblado de San Agustín, del Municipio de Mapimí, en Durango, cuando encontraron la existencia de una osamenta humana con varios huesos regados en el lugar, gracias a que un perro paseaba con un cráneo humano en el hocico.
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Tras el macrabro hallazgo, la dueña del animal llamó inmediatamente al número de emergencias, 911, donde explicó los hechos e inició una movilización de la Fiscalía General del Estado de Durango (FGE).
Al llegar al lugar, los elementos adscritos a la Policía Estatal dieron fe de lo relatado, por lo tanto, dieron parte al personal de la Vicefiscalía Región Laguna.
Tras llegar los peritos, incautaron mandíbulas que aún tenían piezas dentales, además de otros restos, como un fémur, que recuperaron en los límites de la propiedad de la denunciante.
De los restos humanos se ordenó la toma de muestras de ADN, con la finalidad de identificar a las víctimas al comparar los perfiles genéticos de las personas desaparecidas en la Región Laguna.