Brasil.- En pleno inicio de semana, un ex alumno de una escuela pública en el estado de Paraná, en el sur de Brasil, disparó contra las personas que se encontraban en esta institución pública, donde mató a una joven e hirió a otra estudiante.
Autoridades informaron que el atacante, antiguo alumno del Colegio Estatal Profesora Helena Kolody en la ciudad de Cambe, entró al centro educativo bajo la justificación de requerir una copia de sus registros escolares. Sin embargo, su propósito era aquello menos imaginable para estudiantes y profesores en el lugar, pues una vez dentro y llegado al lugar donde se encontraba los alumnos de la escuela pública decidió sacar un arma escondida y alcanzando a dispar contra dos personas.
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Entre las víctimas se registró el fallecimiento de una joven de 16 años y otro estudiante que resultó herido e internado al hospital una vez que el acto de violencia terminó con la detención del agresor de 21 años, según el informe de los medios, por la policía.
“Según las informaciones iniciales, hubo un episodio de violencia, una alumna murió y otro alumno fue tiroteado y está internado”, informó el gobierno estatal en un comunicado.
Los hechos provocó reacciones de distintas figuras de autoridad y personas, de las cuales el ministro de Justicia, Flavio Dino, atribuyó lo ocurrido en Cambe a “la irresponsable proliferación de mensajes de odio” y a la “cultura de las armas” promovida por el expresidente Jair Bolsonaro (2019-2022), que propugnaba la violencia.
¿Y qué dijo el presidente Lula da Silva sobre el acontecimiento?
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, acudió a Twitter y dijo que se enteró del tiroteo con “gran tristeza e indignación”, y agregó: “Otra vida joven arrebatada por el odio y la violencia que ya no podemos tolerar dentro de nuestras escuelas y la sociedad”.
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Entre marzo y abril, hechos similares ocurrieron en otras escuelas. El más grave ocurrió en una guardería en el estado de Santa Catarina, donde un hombre mató a cuatro niños pequeños con un hacha.
Cuando esta ola de violencia sin precedentes comenzó hace unos tres meses, el Ministerio de Justicia endureció las reglas relacionadas con las redes sociales.
