?Ginebra.- La máquina taladradora que perfora el túnel suizo de San Gotardo,
bajo los Alpes y el más largo del mundo con 57 kilómetros, ha conseguido
horadar desde el lado norte los 180 centímetros que faltaban para unir
esta parte con la zona sur, entre los aplausos de centenares de personas
que siguen la ceremonia.
En unos 20 minutos, la tuneladora avanzó a través de la roca hasta abrir
un enorme boquete que dejó al descubierto la luz del otro lado del
túnel, la de la región suizo-italiana de Tesino.
Con el encuentro de los mineros del norte y los del sur a la altura de
localidad suiza de Sedrun, se concluye un túnel que ha desbancado al de
Seikán (Japón) , de 54 kilómetros, como el más largo del mundo.
Antes de ponerse en funcionamiento la enorme máquina, el ministro suizo
de Transportes, Moritz Leuenberger, destacó ante los asistentes las
dificultades y obstáculos que había ido superando esta gran obra de
ingeniería que hoy cumple una importante etapa simbólica con la
conclusión de la excavación completa del túnel.
Precedido por una interpretación musical en la sala bajo tierra
habilitada para los distintos actos -que retransmiten en directo en
Suiza la radio y la televisión- Leuenberger agradeció a los ministros de
Transporte de la UE que, desde Luxemburgo, donde celebran un consejo,
siguen la ceremonia.
Poco después, un sacerdote católico y un pastor protestante,
representando a las dos religiones mayoritarias de Suiza, bendijeron la
obra, que desde su comienzo hace casi diez años ha costado la vida a
ocho trabajadores, como destacó un responsable de la empresa Alp Transit
que lleva a cabo los trabajos.
El fin de la perforación del túnel de base supone una importante etapa
de cara a su apertura al tráfico ferroviario, prevista para 2017, de la
que se beneficiarán directamente 20 millones de habitantes del sur de
Alemania, Suiza y el norte de Italia.
Los ingenieros prevén que al menos 300 trenes de pasajeros o de
mercancías pasen cada día por este túnel, un nuevo recorrido que
permitirá a los ferrocarriles alcanzar los 250 km/h y reducirá una hora
la conexión Zúrich-Milán, hasta las 2 horas y 40 minutos.