Estados Unidos.- En prevención ante un inminente aumento de llegada de inmigrantes en los cruces ilegales, el gobierno de Biden ha anunciado este martes que enviarán 1,500 soldados para elevar la seguridad en la frontera sur, cerca de México, para apoyar a las autoridades que se enfrentarán a decenas de miles de inmigrantes que se espera que ingresen al país una vez que se levanten las restricciones de COVID-19.
A pedido del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), los miembros del servicio de EE. UU. serán enviados en un despliegue temporal de 90 días para ayudar a la Patrulla de Aduanas y Fronteras (CBP), anunció el Pentágono el martes.
Las tropas no llevarán a cabo trabajos de aplicación de la ley, sino que realizarán tareas de apoyo que liberarán a los agentes de la CBP para detener y procesar a los migrantes.
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El portavoz del Pentágono, el general de brigada Pat Ryder, dijo que se espera que las fuerzas en servicio activo comiencen a llegar el 10 de mayo y provendrán de unidades del Ejército y la Marina.
“Estos 1.500 militares llenarán las brechas de capacidad críticas, como la detección y el monitoreo en tierra, la entrada de datos y el soporte de almacén, hasta que CBP pueda abordar estas necesidades a través del soporte contratado”, dijo a los periodistas en el Pentágono.
Los 1500 soldados adicionales en servicio activo se unirán a los 2500 soldados de la Guardia Nacional que ya están desplegados a lo largo de la frontera sur de EE. UU. Las cifras no incluyen a los miembros de la Guardia Nacional de Texas movilizados para una misión dirigida por el estado llamada Operación Lone Star .
Ryder no dijo qué unidades se movilizarían, pero dijo que el Pentágono estaba explorando opciones para reemplazarlas con tropas de reserva y enviar a casa a las tropas en servicio activo.
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Algunos grupos de defensa de la inmigración criticaron el uso de tropas a lo largo de la frontera, mientras que otros observadores vieron el despliegue como una señal de que la administración no está preparada para que se levanten las restricciones por la pandemia.
“El despliegue de personal militar sugiere una preocupante falta de preparación para esta transición”, dijo Andrea Flores, exasistente de Biden que ahora es asesora de inmigración del senador Robert Menéndez (DN.J.).
Los funcionarios estadounidenses esperan que los cruces ilegales superen los 10.000 por día cuando la política fronteriza de la era de la pandemia conocida como Título 42 finalice el 11 de mayo.
