Estados Unidos.- Una situación fuera de lo común se registró el pasado fin de semana en un vuelo de Delta Airlines que despegó de Salt Lake City, Utah, pues una falla de presurización en la aeronave hizo que los pasajeros sufrieran rotura de tímpanos y hemorragias nasales, desatando un pánico generalizado entre los ocupantes.
Según declaraciones de un portavoz de la aerolínea, el avión Boeing transportaba 140 pasajeros en ruta a Portland, Oregón, cuando el avión “no pudo presurizar por encima de los 10 mil pies” y “las máscaras de oxígeno no se desplegaron”, lo que hizo que la presión en la aeronave aumentara y los pasajeros empezaran a experimentar estas reacciones.
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La pasajera Jaci Purser comentó al canal KSL TV: “Me agarré la oreja y luego retiré la mano y había sangre (…) sentí un dolor punzante”.
Por otra parte, la pasajera Caryn Allen dijo al mismo medio: “Miré a mi marido y tenía ambas manos sobre las orejas, como inclinado hacia adelante (…) Miré una fila detrás de mí, al otro lado del pasillo, y había un hombre que claramente tenía una hemorragia nasal muy grave y la gente estaba tratando de ayudarlo”.
Ante esta situación, el avión fue desviado de regreso al Aeropuerto Internacional de Salt Lake, en Utah, donde al menos 10 personas necesitaron evaluación o tratamiento médico, aunque no se reportaron heridos graves.
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Delta Airlines emitió un comunicado disculpándose con los pasajeros por los inconvenientes presentados y agregó que los técnicos solucionaron el problema de presurización del avión y este volvió a prestar servicio al día siguiente.
