Estados Unidos. Un maestro sustituto en la Northside High School de Fort Worth, Texas, Estados Unidos, desató controversia tras publicar en redes sociales que los agentes de inmigración debían investigar a sus alumnos porque “ni siquiera hablan inglés”.
Este comentario generó una ola de críticas por parte de padres de familia, organizaciones de derechos humanos y la comunidad educativa, quienes lo señalaron como discriminatorio y perjudicial para los estudiantes migrantes.
El distrito escolar de Fort Worth emitió un comunicado en el que rechazó cualquier contacto de su personal con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas y anunció una investigación interna para determinar si el maestro violó las normas de la institución.
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Además, la Asociación de Maestros de Texas enfatizó que el enfoque en las aulas debe ser garantizar la seguridad y el aprendizaje de todos los alumnos, sin importar su idioma o estatus migratorio.
Este incidente ocurre en un contexto de creciente tensión, luego de que la administración de Donald Trump firmara una directiva que elimina restricciones a redadas y arrestos en espacios sensibles como escuelas e iglesias.
Defensores de derechos humanos han advertido que estas medidas generan miedo en las comunidades migrantes y afectan el acceso de los niños a la educación. Líderes religiosos también han pedido al gobierno reconsiderar estas políticas y actuar con humanidad ante la situación de miles de familias en Estados Unidos.
