Tokio, Japón.- Kelly y Carlos Ghosn, el destituido presidente de la automotriz, fueron arrestados a su llegada a Japón el 19 de noviembre bajo la sospecha de presentar montos inferiores a los reales sobre los ingresos de Ghosn en los estados financieros durante varios años y estas detenciones sacudieron la industria automotriz mundial y tensaron la alianza de Nissan con el fabricante de automóviles francés Renault.
Greg Kelly fue liberado bajo fianza después de más de un mes de detención por cargos de mala conducta financiera, ya que un tribunal de Tokio rechazó la solicitud de fiscales para mantener al ejecutivo estadounidense en custodia.
Kelly señaló en una declaración que no había falsificado ningún documento y esperaba recuperar su honor en la corte. Agregó que quería regresar con su familia lo antes posible, informó la emisora pública japonesa NHK.
Continúan las investigaciones
El fallo del Tribunal de Distrito de Tokio se produjo después de una apelación de la familia de Kelly en Tennessee, quien pagó una fianza de 70 millones de yenes (640.000 dólares) en efectivo, indicó la corte. Pero se le podría prohibir que abandone Japón o que hable con personas relacionadas con el caso, reportó NHK más temprano, aunque pueden haber excepciones para viajes al extranjero, caso por caso.
Un portavoz de Nissan apuntó que el fabricante de automóviles no estaba en condiciones de comentar el último giro en la saga de más de un mes.
“La propia investigación de la compañía descubrió evidencia sustancial y convincente de mala conducta, lo que resultó en un voto unánime de la junta directiva para despedir a Ghosn y Kelly como presidente y director representativo. Nuestra investigación está en curso”, dijo el portavoz de la automotriz.
