Ciudad de México.-
El radiotelescopio Parkes ha observado dos chorros de partículas de altas
energías que tienen su origen en el centro de la Vía Láctea que se mueven a
velocidades supersónicas y se extienden 50 mil años luz fuera del plano
galáctico, equivalente a la mitad del diámetro de nuestra galaxia.
“Nuestro Sistema Solar se encuentra a 30 mil años luz del centro
de la galaxia, pero estamos perfectamente seguros
porque los chorros se mueven en una dirección diferente a la nuestra”,
explica Lister Staveley-Smith, de la Universidad de Western Australia y coautor
del estudio.
“La cantidad de energía de estos chorros es increíble, alrededor de un
millón de veces superior a la explosión de una supernova”, comenta
Staveley-Smith.
Invisibles para el ojo humano, los chorros se extienden alrededor de
dos terceras partes a través del cielo de horizonte a horizonte, según el diario
ABC.es.
Estas fuentes de energía coinciden con regiones en las que se han registrado
emisiones de rayos gamma por el telescopio Fermi y con la “nube” de
emisiones de microondas que descubrió el WMAP y el telescopio Planck.
Anteriormente no se sabía si estos chorros eran producto de una quásar
o por una formación estelar, pero los nuevos
datos revelan cómo se alimentan estas enormes eyecciones de energía.
Distintas generaciones de estrellas que se forman y explotan han impulsado las
eyecciones de estos chorros en el centro de la Vía Láctea en los últimos cien
millones de años. Los científicos creen que esta radiación juega un papel
importante en el campo magnético de la galaxia.IN