Israel.- A casi una semana de haber reanudado sus ataques en la Franja de Gaza, Israel sigue expandiendo sus bombardeos hacia otras regiones, pues la tarde del sábado 22 de marzo se efectuaron una serie de detonaciones en Líbano, las cuales habrían dejado un saldo de por lo menos 8 personas sin vida.
De acuerdo con la prensa local, pese a la tregua que rige con el movimiento libanés Hezbolá, Israel habría efectuado sus ataques como “respuesta” tras presuntamente interceptar cohetes disparados desde el país vecino, algo que este último niega:
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Las acusaciones del enemigo israelí forman parte de los pretextos para continuar sus ataques contra Líbano, que no han cesado desde que se anunció el alto el fuego.
La Agencia Nacional de Noticias libanesa (NNA) informó que los primeros bombardeos mataron a cinco personas, incluyendo un menor, en la localidad meridional de Tulin, y una segunda detonación dejó un saldo de tres muertos en la ciudad de Tiro.
Esta se convierte entonces en la mayor escalada de violencia desde que el acuerdo de tregua puso fin el 27 de noviembre, a dos meses de guerra abierta entre Israel y el proiraní Hezbolá.
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Una vez notificados estos ataques, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Israel Katz, ordenaron al ejército que lleve a cabo “una segunda andanada de bombardeos”. Por su parte, el primer ministro de Líbano, Nawaf Salam, advirtió del riesgo de que las operaciones militares se reanuden en la frontera sur.
