?Madrid.- Las centrales Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones
Obreras (CCOO) estiman que el seguimiento de los trabajadores a la
huelga general en España es del 70%, mientras el gobierno prefiere
evitar las cifras.
En rueda de prensa el secretario de Organización de CCOO, Antonio del
Campo, valoró la huelga como ‘un éxito’ de los sindicatos, al ser de
unos 10 millones de trabajadores asalariados los que participan del paro
laboral de 24 horas.
Llamó al gobierno español a ‘rectificar y dar oportunidad al diálogo
social, acabar con las políticas de recorte de derechos laborales,
modificar la reforma laboral y se vuelvan a negociar las medidas’
La huelga fue convocada por ambas centrales en protesta contra la
reforma laboral y las medidas de ajuste contra la crisis económica del
gobierno español, que consideran recorta los derechos laborales,
principalmente los de despido e indemnización de trabajadores.
Destacó que a 10 horas de iniciarse la huelga fue el sector nocturno el
que mayor participación en la huelga ha tenido, principalmente servicios
de limpieza y sectores industriales.
En tanto, el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez
Zapatero, explicó que la posición del gobierno en esta jornada es de
‘garantizar el derecho a huelga y también el del derecho al trabajo’.
Antes que el mandatario, el ministro español de Trabajo e Inmigración,
Celestino Corbacho, aseguró que el gobierno ‘no va entrar en una guerra
de cifras con los sindicatos’, y evitó dar una estimación sobre el
seguimiento.
Sostuvo que hay un 97% de los servicios mínimos de transporte pactados, y
llamó a los sindicatos a evitar incidentes en estaciones de metro, de
autobuses y centros de trabajo.
La jornada de huelga general se ha realizado con algunos incidentes,
como la detención de dos ‘piqueteros’ que bloqueaban la salida de
autobuses en la estación de Chamartín, de Madrid.
Asimismo, dos activistas fueron atropellados en diferentes acciones en
Castilla La Mancha y Madrid, siendo en el segundo de los casos una mujer
que fue reportada como grave tras ser internada en un hospital del sur
de la capital española.
El panorama en las grandes ciudades era de fuertes concentraciones en
estaciones de Metro y autobuses, más aún tras pasar las horas punta de
la mañana.
En el caso de Madrid, los autobuses de cercanías reportaron mayores
problemas para poder ofrecer los servicios mínimos, mientras que el
Metro operaba con una mayor normalidad en un 50% del servicio pactado.
