Washington.- La mentalidad sexual del ex presidente Bill
Clinton, quien estuvo en el ojo del huracán por su relación íntima con
la becaria Monica Lewinsky, es ?la de un joven de 18 años?, según una
nueva biografía del ex inquilino de la Casa Blanca.
Han pasado más de 12 años desde el ?caso Lewinsky?, uno de las
escándalos más sonados y sórdidos de la presidencia de Estados Unidos,
que tuvo todos los ingredientes para un coctel mediático explosivo:
política, sexo y mentiras.
Pero aunque los años pasan ?Clinton cumplió el jueves 64 años?, los
libros sobre las razones por las que este astuto político fue el segundo
en la historia del país en estar al borde de la destitución por orden
del Congreso se siguen vendiendo.
Esta vez, el historiador Michael Takiff es quien vuelve a ahondar en la
vida del ex presidente en A Complicated Man: The Life of Bill Clinton as
Told by Those Who Know Him o, en castellano, ?Un hombre complicado: la
vida de Bill Clinton contada por aquellos que lo conocen?. Takiff
entrevistó a más de 150 periodistas, políticos, asesores y gente que
vivió de cerca los momentos más ignominiosos del entonces mandatario.
Entre ellos se cuenta Nina Totenberg, periodista de la radio pública
estadounidense NPR y una de las más incisivas a la hora de relatar
aquellos años.
Sin tapujos, Totenberg asegura que si hay que hablar de sexo y Clinton,
hay que dejar algo claro: ?Tenía la mentalidad de un joven de 18 años?.
Algunos entrevistados afirman también, por ejemplo, que Lewinsky, quien
tenía entonces 23 años, se sentía más atraída por el que fuera director
de comunicaciones de la Casa Blanca, George Stephanopoulos, que por el
hombre más poderoso del mundo.
Sobre por qué Clinton mintió en televisión, negando que había tenido
relaciones sexuales con Lewisnky y poniendo su presidencia en juego al
cometer perjurio, Totenberg tiene una respuesta: Clinton actuó como
cualquier marido asustado, incapaz de enfrentarse a su esposa, la actual
secretaria de Estado, Hillary Clinton.
En 1998, Clinton estuvo a unos cuantos votos de ser despedido de la Casa
Blanca, pero actualmente es considerado como un buen presidente y hoy,
sábado, celebrará su cumpleaños en una fiesta con viejos amigos en la
que, por supuesto, no faltará su esposa Hillary.
