Ciudad de México.- Los “gigantes” del bajo Manhattan comienzan a asomar su nuevo rostro
luego de un lento levantamiento, tras 11 años de caer ante los ataques
terroristas en el corazón financiero de la ciudad de Nueva York.
Así, el término de “zona cero” se borra poco a poco con
el avance de los cuatro rascacielos que conformarán el nuevo complejo
del World Trade Center, uno de los cuales, la Torre Uno, supera ya al
“gigante” Empire State.
El que será el rascacielos más alto de Estados Unidos, con una altura de
mil 776 pies (541 metros) -año de la independencia estadounidense- ha
logrado superar la altura del Empire State, que tras los ataques fue
icono de grandeza de NYC.
El año pasado en el décimo aniversario del 9/11, se logró inaugurar
alrededor de 8 acres de este multimillonario proyecto, de los 16 que lo
conforman.
Las dos cascadas, colocadas en el lugar exacto donde se erigían las
Torres Norte y Sur, enmarcadas con los nombres de las víctimas, han
recibido 4.5 millones de visitantes
Sin embargo este complejo de rascacielos aún tiene problemas para
levantarse por completo y sobre todo dar un espacio para recordar lo
sucedido en septiembre de 2001.
La Torre Uno, pese a ser la más emblemática por su altura, no será el
primer rascacielos terminado, la Torre Cuatro, con sus 297.7 metros,
liderará la conquista del cielo neoyorquino el 2013
La otrora Torre Libertad abrirá en 2014 como un espacio dedicado a oficinas, y con observatorios en los pisos 100, 101 y 102.
Mientras tanto, el World Trade Center Tres tiene ocho pisos construidos,
hasta el momento, de los 80 que tendrá en el año 2015 o 2016, fecha que
se estima su terminación.
El proyecto de la Torre Dos, un rascacielos que contaría con 88 pisos,
es incierto pues no se comenzará a construir hasta que repunte el
mercado de bienes raíces en EU.
El centro de transportes que será erigido cerca del sitio de la
tragedia, que conectará 13 estaciones de metro y trenes con destino al
estado de Nueva Jersey, diseñado por el arquitecto español Santiago
Calatrava, verá la luz hasta el 2015.
Dos proyectos más suman esta lista de pendientes que enfrenta la
renovación del bajo Manhattan. Un centro de artes cuya planeación es
nula y el museo de conmemorativo.
Este último es pieza fundamental para completar este nuevo rostro del
sur de la ciudad de Nueva York, pues es el relato de lo sucedido el 11
de septiembre de 2001 y en este inmueble descansarán objetos rescatados
de la zona de la tragedia, sin embargo su construcción estaba detenida
desde hace un año ya que existía una disputa sobre el financiamiento
entre la fundación que controla el museo y la Autoridad Portuaria.
Apenas este lunes, en la víspera del onceavo aniversario del 9/11, los
gobernadores de Nueva York y Nueva Jersey, que controlan la Autoridad
Portuaria, así como el alcalde de la ciudad, Michael Bloomberg,
presidente de la fundación, lograron un acuerdo y aseguraron “que se
reiniciará (la construcción) en breve y no se detendrá hasta que el
museo esté acabado”
Ni la fundación del memorial del 11-S, ni la Autoridad del Puerto de
Nueva York y Nueva Jersey, han logrado acordar qué entidad se encargará
de recabar los fondos para reanudar la construcción del museo, ni cuál
de ellas lo administrará cuando comience a funcionar.CHG
