Estados Unidos. Un feroz tornado azotó el noreste de Arkansas este miércoles, dejando a su paso una devastación sin precedentes. Clasificado como un tornado “wedge” debido a su enorme base, el fenómeno, cuyas imágenes fueron capturadas por varios testigos, fue descrito como “monstruoso” por su tamaño y fuerza. Los vientos, que alcanzaron hasta 320 kilómetros por hora, arrasaron con edificaciones, lanzaron escombros y cortaron la energía de más de 40 mil hogares, dejando a la región sumida en la oscuridad.
El tornado, que comenzó cerca de Jonesboro, avanzó rápidamente hacia la frontera con Misuri, afectando gravemente a comunidades como Lake City y Blytheville. En los videos captados, se puede ver el gigantesco embudo oscuro avanzando por zonas urbanas y rurales, mientras los destellos de explosiones de transformadores eléctricos iluminan la escena. Las autoridades locales confirmaron al menos siete muertes y decenas de heridos en los municipios de Monette y Lake City.
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La gobernadora de Arkansas, Sarah Huckabee Sanders, declaró el estado de emergencia, activando equipos de rescate y ayuda para los afectados. “Estamos trabajando sin descanso para restaurar los servicios esenciales y brindar apoyo a las familias”, expresó. Las condiciones climáticas siguen siendo severas, y las autoridades han instado a los residentes a mantenerse en refugios seguros mientras las tormentas continúan azotando la región.
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Este tornado forma parte de un brote más amplio de tormentas severas que han golpeado el centro y sur de Estados Unidos, con casi 100 tornados reportados en un solo día. Además de Arkansas, los estados de Tennessee, Kentucky, Indiana y Misuri han sufrido graves consecuencias, con varias muertes y personas heridas, mientras se monitorean posibles inundaciones catastróficas en los próximos días.
