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China. El COVID, virus que comenzó a propagarse a partir de su aparición en China, parece tener nuevamente entre sus manos a la población de dicha región del mundo. Y es que viven nuevamente momentos complicados derivado de la pandemia por el COVID-19.
De manera específica, Shanghái se enfrenta a un rebrote. En cifras, las autoridades reportan 400 mil nuevos casos positivos de coronavirus desde marzo a la fecha. Por otro lado, suman ya 25 víctimas mortales tras el impacto del COVID en su organismo. Tan solo este jueves, Shanghái acumuló otras ocho nuevos fallecimientos; se trata de la ciudad más poblada de China.
Se detalló que estos ocho decesos corresponden a personas de aproximadamente 77 años de edad, y quienes precisamente presentaban comorbilidades como tumores malignos o hipertensión. Derivado de ello, las autoridades de Gobierno han insistido en que la causa de la muerte fue la enfermedad previa.
El brote de COVID en Shanghái ha sido calificado como el peor ocurrido en China desde la primera ola, tras el nacimiento del virus en Wuhan. Y ha generado que se ponga a prueba la inflexible estrategia cero covid del país, que busca eliminar las infecciones con duros confinamientos, test masivos y cierre de fronteras.
Shanghái, la ciudad más grande de China con 25 millones de habitantes, enfrenta un confinamiento desde marzo con el peor brote en el país desde el inicio de la pandemia. Los habitantes han renegado de las restricciones por la falta de alimento, las condiciones inadecuadas en los centros de cuarentena y la drástica aplicación de las medidas.
En contra parte, el Ministerio de Salud señala que relajar demasiado las restricciones podría saturar el sistema sanitario y provocar millones de muertes. También porque la tasa de vacunación sigue siendo baja entre las personas mayores: sólo algo más de la mitad de los mayores de 80 años han recibido una dosis de refuerzo.
