Corea del Sur.- La Oficina de Investigación de Corrupción para Altos Funcionarios en Corea del Sur ha solicitado una orden de aprehensión en contra del presidente destituido, Yoon Suk-yeol, quien enfrenta una investigación para determinar si su decreto de ley marcial a principios de diciembre constituyó una rebelión.
La ya mencionada oficina, que trabaja en colaboración con la policía y las autoridades militares, confirmó este lunes 30 de diciembre que la solicitud de aprehensión fue presentada ante la Corte del Distrito Occidental de Seúl, pues se busca que el político conservador sea interrogado por cargos como abuso de autoridad e intento de orquestar una rebelión en el país asiático.
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Mientras tanto, el abogado del presidente destituido, Yoon Kap-keun, denunció el intento de detención y presentó una impugnación ante la misma corte, argumentando que la solicitud de la orden es inválida y que la agencia anticorrupción carece de autoridad legal para investigar cargos de rebelión:
Un presidente en funciones no puede ser procesado por abuso de poder (…) Por supuesto, hay opiniones académicas diferentes sobre si se puede investigar a un presidente por abuso de poder y algunos afirman que las investigaciones son posibles. Pero incluso cuando se permiten investigaciones, la opinión predominante es que deben ejercerse con la máxima restricción.
La solicitud ocurre después de que Yoon Suk-yeol desatendiera varias solicitudes del equipo de investigación conjunto y de la fiscalía para comparecer a interrogatorio, además de bloquear el allanamiento de sus oficinas.
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Por último, aunque Yoon tiene el privilegio presidencial de inmunidad frente a procesos penales, tales protecciones no se extienden a acusaciones de rebelión o traición, por lo que se desconoce si el tribunal aprobará o no la solicitud de detención presentada este lunes.