Confirman identidad de delator de espías rusos

?Moscú.- Un legislador ruso especializado en seguridad nacional confirmó el jueves un reporte periodístico de que un alto funcionario de inteligencia ayudó a Estados Unidos a arrestar a 10 espías rusos a mediados de año. Los presuntos espías, entre los que estaba la periodista peruana Vicky Peláez, fueron detenidos en junio, algunos días después de la visita a Estados Unidos del presidente ruso Dmitry Medvedev. Esos espías fueron intercambiados por cuatro agentes rusos que habían sido condenados por espionaje en el interior de su propio país. Fue el mayor intercambio de agentes entre los dos países desde el fin de la Guerra Fría. El respetado diario ruso Kommersant citó a fuentes anónimas que identificaron al alto funcionario ruso únicamente como el coronel Shcherbakov, quien supuestamente encabezaba la sección sobre Estados Unidos de una división del Servicio de Inteligencia Extranjero especializada en agentes que han sido enviados al exterior sin una misión específica, pero que pueden ser activados de ser necesario. Gennady Dudkov, un integrante de la Comisión de Seguridad Nacional del parlamento ruso, dijo más tarde que ”Shcherbakov entregó a nuestros agentes en Estados Unidos… Sabíamos de esto mucho antes de lo que se publicó hoy en el Kommersant”. Gudkov no pudo ser ubicado para que comentara al respecto, incluyendo cómo se enteró de la probable participación de Shcherbakov. Sus declaraciones, reportadas en un principio por la agencia de noticias Interfax, fueron confirmadas posteriormente por su oficina. El diario citó a una fuente del gobierno del Kremlin, la cual indicó que el paradero de Shcherbakov era conocido y que se había enviado a un ”Mercader” por él, en referencia a Ramón Mercader, el agente soviético que asesinó al líder de la revolución rusa Leon Trotsky en la Ciudad de México en 1940. El Servicio de Inteligencia en el Exterior, conocido por sus iniciales SVR, y el Ministerio del Exterior de Rusia se negaron a comentar sobre el caso. En Washington, el vocero del Departamento de Justicia Dean Boyd, el portavoz del FBI Paul Bresson y el vocero de la CIA George Little se negaron a hacer comentarios sobre esta información. De acuerdo con el diario, Shcherbakov -quien presuntamente tiene una hija que vive en Estados Unidos- llegó a ese país tres días antes del comienzo de la visita de Medvedev. El periódico dijo que las fuentes lo calificaron de prófugo, pero se desconoce cómo supieron que su viaje no se trató de un asunto meramente personal o profesional. Tras el arresto de los 10 espías rusos, un fiscal estadounidense comentó que los habían estado vigilando durante años. La información publicada por el Kommersant no define hasta dónde llegó la presunta ayuda de Shcherbakov en el arresto de los agentes. Según el diario, las fuentes indicaron que éste visitó a uno de los espías arrestados, Mijaíl Vasenkov, en la cárcel para exhortarlo a confesar. Vasenkov, que utilizaba el alias de Juan Lázaro, insistía en que no era ruso, y entonces Shcherbakov presentó un archivo sobre Vasenkov a las autoridades estadounidenses. Un presunto integrante del grupo de espías, de nombre Christopher Metsos, sigue prófugo. Fue arrestado en Chipre, pero desapareció tras ser puesto en libertad bajo fianza.