Francia.- La política agrícola en Francia ha desatado gran inconformidad entre quienes viven de esta práctica, por lo que decenas de agricultores han decidido acudir ante los edificios de gobierno para una jornada de manifestaciones, la cual resultó ser bastante particular debido al uso de toneladas de estiércol.
Imágenes difundidas en redes sociales dejan ver a los trabajadores frente a los edificios estatales en Cahors, valiéndose de sus herramientas de trabajo para arrojar toneladas de estiércol y desechos, lo que generó aproximadamente 300 metros cúbicos de residuos.
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Sin embargo, la protesta no se limitó a Cahors, ya que en Digne-les-Bains agricultores de Alpes de Alta Provenza llevaron a cabo acciones similares, esparciendo y quemando estiércol frente a instituciones financieras y bloqueando las oficinas de Tesorería como símbolo de su descontento.
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Las demandas de los agricultores se centran en mejorar sus condiciones laborales e ingresos, ya que se sienten afectados por el aumento de costos de producción, diferencias regulatorias con otros países europeos, trámites administrativos, impuestos, controles y daños causados por la fauna.
La decisión de intensificar la protesta surgió tras una reunión insatisfactoria con el gobierno, llevando a los agricultores a bloquear el acceso a la ciudad, esparciendo estiércol en rotondas y generando congestiones de tráfico. Además, los agricultores han anunciado que mantendrán la movilización hasta que el gobierno atienda sus demandas y asegure un futuro digno para el sector.
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Laurent Depieds, presidente de la Federación Regional de Sindicatos de Agricultores Paca (FRSEA), destaca la pérdida de confianza en el gobierno, argumentando que los agricultores no se sienten escuchados ni respetados. El activista también exige una respuesta urgente y concreta por parte de las autoridades gubernamentales.
