Ciudad de México.- Unos 4 mil 600 efectivos del ejército brasileño participan este jueves, junto con casi un millar de policías, en una operación contra el crimen en seis favelas de la zona oeste de Río de Janeiro, cuya seguridad está controlada por las Fuerzas Armadas desde febrero pasado.
El operativo se enmarca en la intervención militar decretada por el presidente brasileño, Michel Temer, para el área de seguridad de Río con el fin de hacer frente a la ola de violencia que azota la región desde la celebración de los Juegos Olímpicos de 2016.Los soldados del ejército han establecido este jueves un cerco en torno a las seis comunidades, situadas en la región de Jacarepaguá, y entrado para retirar barricadas e inspeccionar tanto vehículos como a personas, según un comunicado del Comando Militar del Este.
Por su parte, 420 policías militarizados auxilian en la incursión y en los bloqueos de las vías colindantes, mientras que 350 agentes de la Policía Civil cumplen mandatos expedidos por la Justicia.
En la acción están siendo utilizados vehículos blindados, aeronaves y equipamientos pesados de las distintas corporaciones, agregó la nota castrense.
También este jueves, integrantes del Batallón de Operaciones Especiales (BOPE) de la Policía Militarizada de Río realizan una operación en la Rocinha, la mayor favela de Río, situada en la zona sur de la capital fluminense.
Habitantes de la región, citados por medios locales, aseguran que han escuchado en las últimas horas intensos tiroteos en esa zona.
Desde el pasado 16 de febrero, cuando Temer firmó el decreto de intervención, el ejército ha participado en diferentes operativos, inspeccionó alguna cárcel y cambió las direcciones de las policías de Río, sin entrar en enfrentamientos directos con las bandas de narcotraficantes que controlan varias favelas de la ciudad.
Solo el año pasado la violencia en todo el estado de Río, cuya población se concentra mayoritariamente en la zona metropolitana de su capital homónima, causó 6 mil 731 muertes, entre ellas más de 100 policías y diez niños alcanzados por balas perdidas.ARG
