Ottawa.- La joven saudita Rahaf Mohammed al-Qunun viaja hacia Canadá, cuyo primer ministro, Justin Trudeau, respondió de forma positiva a la solicitud de asilo, poniendo fin a la incertidumbre sobre su destino tras huir de su familia y su país.
En declaraciones a la prensa esta tarde, Trudeau expresó la bienvenida a la solicitud de asilo formulada por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el cual dio protección a la joven de 18 años en Tailandia, donde fue detenida el pasado día 6 mientras viajaba por el aeropuerto de Bangkok, en ruta de Kuwait a Australia.
Poco después de que las autoridades tailandesas anunciaron la salida de Al-Qunun rumbo a Canadá, en un vuelo que hará escala en Seúl, Corea del Sur, el primer ministro Trudeau ante la prensa manifestó que su país está encantado de otorgar asilo a la joven saudita.
“Le concedimos asilo. Nos complace hacerlo, porque Canadá es un país que reconoce la importancia de defender los derechos humanos y los derechos de las mujeres en todo el mundo”, dijo.
El pasado fin de semana durante un viaje con su familia a Kuwait, la joven saudita decidió huir y llegó al Aeropuerto Internacional de Bangkok, donde fue arrestada.
Las autoridades tailandesas tenían intención de regresarla a su país a petición de Arabia Saudita, pero Al-Qunun se atrincheró en una habitación del hotel en el aeropuerto, atrayendo la atención internacional.
La joven huyó de su familia tras rechazar un matrimonio forzado y renunciar al Islam, en un país donde las mujeres son sometidas a varias restricciones, además de ser obligadas a estar bajo la tutela y autoridad de un hombre (padre, esposo u otro, según el caso).
A fin de defender su causa, desde Tailandia pidió asilo a Canadá, Estados Unidos, Australia y Reino Unido a través de su cuenta de Twitter.
Para este viernes, dicha cuenta de la red social fue desactivada después de recibir amenazas de muerte y otros mensajes desaprobando sus acciones, de acuerdo con reportes de prensa procedentes de Tailandia.