Reino Unido. Viajar al extranjero puede ser una experiencia inolvidable, quedarte a vivir en un país que está a miles de kilómetros del tuyo puede ser un desafío.
La mexicana Michelle Salazar viajó a Reino Unido para estudiar la universidad, sin embargo, al querer conseguir un trabajo, la connacional se topó con un sin fin de trámites, entre ellos lograr sacar la visa de trabajo.
Sin embargo, Salazar no se dio por vencida y optó por tomar un programa de graduados emprendedores donde la universidad patrocinaba dos años de visa para poder trabajar.
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Michelle venía de una familia que tenía una franquicia de pollo asado, por lo que se le hizo fácil poner algo parecido junto con su esposo, antes su novio, para atender eventos pequeños, sin embargo la pandemia por el COVID-19 hizo que el pequeño negocio fracasara.
La pareja enfocó sus esperanzas en la tortilla de harina cosa que a los clientes les llamaba la atención, por lo que se aventuraron a vender tacos de pollo asado con tortilla de harina por internet.
Cuando la cosa mejoró para los negocios, es decir después de la pandemia, el ahora matrimonio decidió vender tacos estilo Sonora en un mercado al aire libre, logrando ser un negocio productivo y rentable llamado “Sonora taquería”.
Los tacos eran un éxito junto a las famosas micheladas, ya que, según Michelle, los ingleses adoran la comida mexicana. Sin embargo el 8 de septiembre recibieron una carta “cese y desista” para eliminar la palabra “taquería” de su negocio.
Resulta que hay una empresa fundada por unos británicos que cuentan con dos restaurantes en Londres, pese a ser lugares exclusivos llevan por nombre “Worldwide “Taquería'”, cuyo nombre comercial es “Taquería Uk”.
Los británicos registraron la palabra “taquería” desde hace más de 15 años, por lo que Michelle y se esposo estarían plagiando el nombre de los restaurantes.
La mexicana subió la carta a redes sociales con la esperanza que alguien los pueda ayudar legalmente y no tengan que perder sus ahorros en una pelea legal, pues buscarán apelar y tratar de quitarles el registro de marca a los británicos con el argumento de que “taquería” es una palabra descriptiva y no especifica por lo que no puede ser registrada.