Ayuda de Washington seguirá, dice Santos

?BOGOTÁ.- El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, consideró ayer que el acuerdo de defensa y seguridad con Estados Unidos, invalidado por la Corte Constitucional, no afecta la ayuda de ese país al suyo. ?Lo importante es que la cooperación va a continuar. La lucha contra el narcotráfico, la lucha contra el terrorismo no tiene tregua. Y esta decisión de la Corte en nada afecta lo que hemos venido recibiendo de Estados Unidos?, dijo Santos. El mandatario formuló la declaración desde la isla caribeña colombiana de San Andrés, a la que llegó para saludar y reconocer la labor de los organismos de socorro que auxiliaron a los 131 ocupantes de un avión de la aerolínea nacional Aires que se accidentó en el aeropuerto Gustavo Rojas Pinilla. El jefe del Estado colombiano reiteró que su gobierno acata la decisión del Alto Tribunal y anunció que se estudiará ?si amerita? llevar al Congreso de la República el acuerdo como un tratado. El ministro colombiano del Interior y de Justicia, Germán Vargas, dijo en Bogotá, unas horas antes, que el Ejecutivo ?deberá tomar una determinación muy pronto?, si acepta que dicho convenio tiene rango de tratado, como lo consideró el alto tribunal. En Washington, el portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley calificó como importante la relación militar con Colombia y dijo que el gobierno estadounidense consultará con el de Santos si hay necesidad de efectuar cambios. ?Nuestros intereses no han cambiado debido a este fallo judicial. Esperamos poder seguir cooperando, pero obviamente trabajaremos con Colombia para determinar qué planea hacer a la luz de esta decisión judicial?, dijo Crowley. El ex comandante de las Fuerzas Militares de Colombia Freddy Padilla, dijo horas antes que si el acuerdo militar con Estados Unidos es remitido al Congreso colombiano, también debería pasar por el Congreso estadounidense y eso puede significar su hundimiento. ?Si Colombia envía este acuerdo al Congreso, Estados Unidos también tendrían que enviarlo a su Congreso, y lo que a nosotros nos dijeron es que Estados Unidos no estaba dispuesto a ese paso por circunstancias de su política exterior?, indicó Padilla, quien encabezó el equipo negociador del convenio y comandó las Fuerzas Militares de Colombia hasta el 6 de agosto. En declaraciones a la emisora La W, el general retirado sostuvo que los asesores jurídicos de entonces notificaron a quienes lo negociaron que Estados Unidos no lo sometería al Legislativo. Si Washington mantiene la postura de no llevarlo al Congreso, ?el acuerdo se hunde? , independientemente de su gestión y aprobación en Colombia, subrayó Padilla. ?Como no habría pari dad, el acuerdo no tendría validez?, concluyó el general en retiro. Por seis votos contra tres, la Corte Constitucional dejó anoche sin efecto el ?Acuerdo complementario para la cooperación y asistencia técnica en defensa y seguridad entre los gobiernos de Colombia y los Estados Unidos de América? , firmado el pasado 30 de octubre en Bogotá. La iniciativa abría las puertas de al menos siete bases de Colombia a tropas y contratistas militares del país norteamericano, lo que desató una ola de rechazo en varias naciones de la región, como Venezuela, Ecuador, Nicaragua o Bolivia. Buscan aclarar lucha armada Por otra parte, en su afán por esclarecer hasta dónde han llegado los horrores del conflicto armado en Colombia en los últimos 30 años, la Fiscalía se dio a la tarea de establecer cuántas personas fueron sepultadas sin identificar en todos los cementerios del país, reveló ayer un alto funcionario . ?No nos podemos aterrar: llevamos 30 años de conflicto y sabemos que en muchos cementerios hay NN? o cadáveres sepultados como nomen nescio o nombre desconocido, dijo en una entrevista con la AP Luis González, jefe de la Unidad de Justicia y Paz, la dependencia de la Fiscalía que investiga los crímenes perpetrados por los grupos armados al margen de la ley. La Fiscalía calcula que en Colombia al menos 41 mil personas fueron desaparecidas con ocasión del conflicto armado. Los paramilitares pudieron haber asesinado a unas 156 mil personas desde 1980 a 200.