?Irak.- Un atacante suicida se inmoló en un cuartel de seguridad curdo en el primero de una serie de ataques el miércoles en la ciudad iraquí de Kirkuk, rica en petróleo, que mataron a siete personas e hirieron a 80.
En cuestión de minutos, estallaron dos bombas en las cercanías, lanzando columnas de humo negro al cielo claro de invierno y poniendo fin a una tregua de seis meses en una ciudad plagada de tensiones étnicas ubicada a 290 kilómetros al norte de Bagdad.
La ciudad está dividida entre curdos, turcomanos y árabes suníes y chiíes, y desde hace tiempo se temía que podría ser un punto de violencia en Irak.
Las explosiones estallaron frente al cuartel de las fuerzas de inteligencia curda, conocida como el Asayish, una autopista y en una estación de gasolina en el sur de Kirkuk.
Imágenes de AP Television News mostraban a los automóviles policiales acelerando con las sirenas ululando para llegar al Asayish cuando se produjo la segunda detonación en el área, cerca de un taxi y derribó a la gente al suelo. Los sonidos de disparos podían escucharse a continuación de la explosión ocurrida a las 10 de la noche.
El general policial Sarhat Qadir dijo que siete personas murieron, entre ellas dos policías, y 80 resultaron heridas en las explosiones. Indicó que la bomba que estalló en la autopista estaba dirigida al patrullero encabezado por el máximo comandante, el coronel Ahmed Shamerani, quien salió ileso del atentado.
Previamente, dos explosiones de menor potencia que parecían estar dirigidas a la Policía, hirieron a seis personas en la capital iraquí.
La primera explosión dejó cuatro heridos frente a la mezquita al-Ansar en el vecindario chií de Ciudad Sadr al paso de un patrullero policial. Pocos minutos después, estalló la segunda bomba en una autopista cercana de Mohammed al-Qasim. Las autoridades dijeron que dos policías que estaban en un patrullero resultaron heridos.
Los policías pidieron que no se revelara su nombre, por no tener autorización para dar información sobre las explosiones en Bagdad.
La violencia en todo Irak ha decrecido considerablemente con respecto a hace algunos años, pero recientemente ha vuelto a recrudecer casi a diario.
