Estados Unidos.- La pandemia del COVID-19 se convirtió en una oportunidad para que el movimiento antivacunas a nivel internacional iniciara una campaña de desinformación, la cual, según un estudio reciente, habría sacado provecho del algoritmo de Facebook para difundir noticias falsas y confundir a la población.
El estudio, publicado por la revista Sciense Advances, tuvo en cuenta más de 200 mil publicaciones realizadas antes de que, en 2020, Facebook eliminará el contenido perteneciente al movimiento Stop Mandatory Vaccination (Detener la vacunación obligatoria), siendo esta una de las campañas que buscó la difusión de la creciente ola de noticias falsas sobre COVID-19 y el sistema de vacunación en general.
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La investigación demostró que el diseño de jerarquías que usa Facebook – primero páginas, luego grupos y al final lo que otros usuarios comparten – terminó por facilitar que las cuentas antivacunas divulgaran enormes cantidades de desinformación relacionadas con el Coronavirus. Además, como el algoritmo de Facebook premia con mayor difusión el contenido que tiene más me gusta o reacciones de enojo, esto desencadenó que incluso las interacciones de los usuarios que estaban en desacuerdo con el contenido falso ayudaron a divulgarlo.
Los expertos a cargo del estudio argumentan que Facebook no logró reducir la desinformación porque no favorece la pluralidad del contenido por cuenta, exponiendo al usuario a contenido cada vez más similar al cual ya reaccionó.
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Por último, señalan que la única forma de reducir la desinformación y evitar que movimientos como el antivacunas cobren mayor relevancia, es rediseñar todas las redes sociales para promover únicamente la información confirmada por las autoridades sanitarias y otras entidades oficiales.
