Estados Unidos.- Este viernes el empresario Elon Musk anunció su decisión de no ejecutar la compra de Twitter, la cual estaba estimada en un total de 44.000 millones de dólares. Y aunque el multimillonario expuso sus razones para rescindir el acuerdo, las cosas no parecen proyectarse muy fáciles para él, pues la red social ha decidido interponer una demanda.
Horas después de que Elon Musk emitiera su carta deshaciendo la compra de Twitter, el empresario y programador informático, Bret Taylor, tomó la red social para comunicar que no aceptarán la cancelación de un “multa” y tomarán acciones legales tras el incumplimiento del acuerdo. Taylor expresó:
La junta directiva de Twitter está comprometida a cerrar la transacción en el precio y los términos acordados con el señor Musk y planea emprender acciones legales para hacer cumplir el acuerdo de fusión. Confiamos en que lo conseguiremos
Cabe recordar que Musk y Twitter acordaron una penalización de 987 millones de euros (1.000 millones de dólares) a pagar por cualquier parte que se retirase del acuerdo. No obstante, si Twitter pretende forzar la compra en los términos acordados y llevar el caso hasta los tribunales, las cosas podrían complicarse para el magnate sudafricano.
La decisión del multimillonario fue tomada en base a que Twitter no respondió las solicitudes de saber exactamente cuántas cuentas falsas o ‘bots’ tenía la red social, las negó sin justificación y, de hecho, le hizo llegar supuestamente datos “incompletos e inservibles”. En este sentido, Elon Musk alega que los encargados de la plataforma incumplieron con sus obligaciones contractuales, por lo que decidió poner fin definitivo al acuerdo de compra.
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Así pues, en una carta publicada por las autoridades bursátiles estadounidenses (SEC), los abogados de Musk aseguraron que Twitter no respetó sus compromisos asumidos en el acuerdo de adquisición por 44.000 millones de dólares, ya que indican:
El señor Musk ejerce (el) derecho de terminar el acuerdo de adquisición y abandona la transacción
Hasta el momento Elon Musk no ha respondido a las declaraciones de Twitter sobre llevar el caso a las estancias legales, pero se presume que este podría ser el inicio de una gran disputa entre el hombre más rico del mundo y una de las plataformas de redes sociales más influyentes en la esfera global.
