Australia.- El caso de una modelo australiana que estuvo a punto de morir después de que le saliera un nuevo lunar en la pierna, continúa conmocionando a la comunidad en general. E incluso ha encendido las alertas sobre lo importante que es protegerse de extensas o fuertes exposiciones al sol.
Esta es la historia de Oceana Strachan, una modelo e influencer de 26 años de edad que hace un tiempo atrás notó una nueva “peca” en su pierna derecha, lo cual le pareció absolutamente normal y hasta bonito. Sin embargo, a medida que pasaban los días, el aspecto del lunar empezó a cambiar, por lo que ella decidió consultar a un especialista; este develó que la jovencita tenía un cáncer de piel muy fuerte, pues su nueva marca poco a poco se había convertido en un tumor.
Junto a un grupo de imágenes que evidencian cómo inició el lunar y siguiendo por su evolución hasta el momento en que fue extirpado, la influencer australiana escribió en una publicación de Instagram que dicta:
Como se puede ver en la primera imagen, mi mancha de melanoma parecía un lunar normal. Soy muy afortunada de que todo lo que me quedó sea una cicatriz
Strachan explicó que su tragedia inició exactamente en 2019, cuando notó que la mancha cambió de aspecto; luego, un examen confirmó que tenía melanoma en fase dos, lo que significaba que la enfermedad tenía el potencial de hacer metástasis en otras partes de su cuerpo y podría llegar incluso a perder la vida. La joven modelo aprovechó su experiencia para enviar un mensaje a los fieles amantes del sol, pues ella misma afirma que su cáncer de piel inició por su excesiva exposición a la luz solar cuando estaba en sus años más jóvenes. Asimismo, la australiana hace un profundo llamado al uso de crema antisolar, agregó:
Recuerdo los veranos cuando tenía 15, 16 y 17 años. Me asoleaba de las 8 de la mañana a las 4 de la tarde, para tener un bronceado y me sentiría reacia a usar protector solar porque no me quemaría después de eso, simplemente me oscurecería (…) ser consciente y tener autoiniciativa es lo que me salvó, pude ser una de las afortunadas de detectarlo lo suficientemente temprano.
Además, la joven, muy preocupada por su futuro, explicó que ahora es consciente de los riesgos de exposición al sol y que tomará precauciones sometiéndose a pruebas que evitarían la propagación de la enfermedad en otras partes del cuerpo. Cabe apuntar que Oceana Strachan, de 26 años de edad, sufrió de melanoma, el tipo más grave, que representa la mayoría de las muertes por cáncer de piel a pesar de constituir solo el 1 % de los casos. Aunque la causa no está clara, el melanoma está relacionado con la exposición a la radiación UV del sol.
Por otra parte, esta afección es particularmente insidiosa, ya que puede parecerse a una peca o a un lunar débil, lo que dificulta la detección de la enfermedad. Sin embargo, su trasfondo puede ser verdaderamente grave. Es por esto que las entidades de salud continuamente hacen un llamado a protegerse de la exposición directa al sol y acudir a especialistas del tema siempre que se pueda o se detecte un agente extraño en la piel.
