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Reino Unido.- Un terrible caso de homicidio conmociona a la población en Reino Unido, pues una mujer de 28 años de edad asesinó brutalmente a su amiga de 25 y luego, salió a comprar papas fritas y una lotería con la tarjeta de la fallecida, sin remordimiento alguno por lo que acababa de ocurrir.
Según los informes, los hechos tuvieron lugar en Thornaby, North Yorkshire, donde las mujeres habrían tenido una pelea luego de que la asesina identificada como Keegan Barnes realizara una fiesta callejera. Así pues, el enfrentamiento hizo que Barnes apuñalara a su amiga Toni y la dejara muriéndose en un charco de sangre, según ella, porque esta última estaba intoxicada y la agredió.
Cuando los paramédicos acudieron a la casa, notaron ropa en la lavadora y que las paredes habían sido recién pintadas, por lo que pusieron en sobre aviso a las autoridades, quienes acudieron hasta el lugar, donde encontraron el teléfono celular de la víctima, cubierto de sangre y escondido debajo de un colchón.
Los paramédicos dijeron que el cuerpo de la víctima estaba frío cuando llegaron y ya estaba muerto cuando Keegan intentó realizar la RCP, por lo que después de matar a su amiga trató de ocultar la evidencia.
Sin embargo, lo más escalofriante de todo es que Barnes, después de matar a su amiga, tomó su tarjeta de crédito y se fue a la tienda para comprar papas fritas y un boleto de lotería. Las personas que la vieron comprando indicaron que parecía estar “en piloto automático” mientras deambulaba por la tienda vestida con un camisón.
Finalmente, Keegan Barnes fue condenada hoy a ocho años y medio de prisión por el homicidio involuntario de Toni, pues se determinó que pese a todo, el acto fue en defensa propia.
